Jon Santacana y su guía Miguel Galindo se quedaron a las puertas de lograr la segunda medalla en los Juegos Paralímpicos de Invierno de Sochi 2014, después de acabar en cuarta posición en el súpergigante para discapacitados visuales de clase B-2.

El esquiador guipuzcoano, que en la primera jornada logró un meritorio oro en descenso, se quedó con la miel en los labios en una accidentada competición, en la que cayeron al suelo un tercio de los participantes.

De hecho, dos errores en el descenso costaron la medalla a Santacana y Galindo y, aunque subrayaron que la nieve estaba «un poco blanda», achacaron a esos dos fallos propios el no poder subir de nuevo al podio.

«La pierna, cuando me pongo en el portillón, se me olvida totalmente. Esta mañana sí que me molestaba y me he tenido que quitar la bota, pero luego se te olvida. En la carrera no es que hayamos esquiado mal, pero hemos cometido dos errores y además importantes, que te cuestan recuperar», explicó Santacana sobre la prueba y su lesión del tendón de Aquiles.

Por su parte, Galindo señaló que «hemos acabado cuartos, eso quiere decir que sin esos dos errores habríamos estado arriba, y demuestra que hemos venido a luchar por todo y que lo de ayer no fue por casualidad. Vamos a seguir luchando en las pruebas que nos quedan».

El triunfo en la prueba fue para el eslovaco Jakub Krako, con un tiempo de 1.20.58, que se impuso al estadounidense Mark Bathum y al canadiense Mac Marcoux, en un final muy apretado, ya que entre el oro y el bronce solo hubo 19 centésimas de segundo de diferencia.

En el resto de la jornada, el austríaco Markus Salcher -súpergigante levantado-, el japonés Akira Kano -esquí alpino sentado- y Roman Petushkov -esquí de fondo, 15 kms sentado- lograron sumar su segunda medalla de oro consecutiva, lo que les convierte en los grandes protagonistas en este arranque.