El coordinador de Lokarri, Paul Ríos, mostró ayer su «absoluto estupor y preocupación» por la falta de diálogo entre los partidos vascos cuando han pasado más de dos años desde el cese de la actividad armada de ETA y la sociedad reclama un acuerdo, como queda en evidencia en todas las encuestas publicadas.

«Si no es ahora, ¿cuándo van a dialogar?, ¿a qué esperan; a que se termine todo esto y ellos no hayan tenido ninguna participación?», preguntó Ríos en una rueda de prensa que tuvo lugar en Bilbo.

Sostuvo que la consolidación del proceso de paz necesita «hechos claros y determinantes, que no puedan ser interpretados de formas diferentes». Entre ellos, citó que ETA complete su desarme en un tiempo prudencial, que el Gobierno español acerque a Euskal Herria a los presos y que los partidos retomen el trabajo en la ponencia de paz del Parlamento de Gasteiz.

«Da igual que sea en público o totalmente en secreto, pero que dialoguen», reclamó. En su opinión, un acuerdo entre las formaciones políticas produciría «una catarsis que desbloquearía absolutamente todo» y propiciaría avances importantes en los otros puntos.

Ríos instó también a los partidos a hacer autocrítica porque «no hay ninguna razón para decir que no están dispuestos a hablar» y defendió que la ponencia de paz debe empezar a funcionar con «los que quieran seguir trabajando».