El presidente de Sinn Féin, Gerry Adams, fue liberado sin cargos de la custodia policial a las 16.00 de la tarde del domingo, tras permanecer casi cuatro días detenido después de que se presentara a declarar voluntariamente en relación a la muerte de Jean McConville en 1972.

En una rueda de prensa horas después de ser liberado, a la que acudió acompañado por la vicepresidenta del partido, Mary Lou McDonald, y el viceprimer ministro norirlandés, Martin McGuinness, entre otros, Adams reiteró que acudió voluntariamente a comisaría, a pesar de que el momento de la citación le preocupaba debido a la cercanía de las elecciones y criticó la decisión policial, al considerar que «los que decidieron mi arresto lo podían haber hecho de otra manera, recordemos que les contacté hace dos meses».

«No fuí a la comisaría de Antrim esperando un trato especial, pero si un trato justo, como el que merece cualquiera, porque los tiempos han cambiado... Enviar otra señal, es animar a los que se oponen al proceso de paz», explicó Adams, que se refirió también a la familia de Jean McConville, «a la que hay que ayudar en lo posible», y reiteró su inocencia en el caso.

Adams recordó que fue con su apoyo con el que se creó la Comisión de los Desaparecidos para recuperar los restos de personas desaparecidas por el IRA y con la que el movimiento republicano colaboró al 100%.

El líder de Sinn Féin mencionó el aniversario hoy, lunes, de la muerte de Bobby Sands tras una larga huelga de hambre, para señalar que, a pesar de la importancia del pasado, lo importante ahora es el futuro, y apuntar que «algunas víctimas del conflicto han sido las que más apoyado el proceso de paz».

Adams se refirió a la falta de evidencias y al material presentado durante los interrogatorios, en los que la Policía buscaba indicios para acusarle de pertenecer al IRA. «Nunca he renegado del IRA, y nunca lo haré. Pero el IRA ya no existe. Durante mi interrogatorio, muchas de las preguntas fueron sobre los 60, mi participación en la lucha por los derechos civiles, mi arrestos en los 70, mi participación en las negociaciones de paz de los 70... Me mostraron fotografías mías y de Martin McGuinness en funerales de miembros del IRA, libros y otros materiales ya publicado... Pero no me han presentado ningún tipo de evidencia, aparte del contenido de las grabaciones de Boston».

Y quiso contextualizar el contenido de las grabaciones teniendo en cuenta quiénes eran entrevistadores y entrevistados. «Moloney y McIntyre se oponen al proceso de paz y entrevistaron a opositores que consideraban que debíamos ser ejecutados por nuestra participación en el proceso... Rechazo todas las alegaciones hechas contra mí en esas grabaciones».

Ahora la Policía norirlandesa enviará sus recomendaciones a la Fiscalía, que decidirá si existe base para presentar cargos contra Adams. El responsable del Ministerio Fiscal, Barra McGrory, ha sido recusado ya que actuó como abogado del líder republicano. El presidente de Sinn Féin, por su parte, se mostró seguro de que «no habrá cargos».

A pesar de que los medios de comunicación le esperaban en la puerta principal de la comisaría de Antrim, Adams se vio obligado a abandonar las dependencias policiales por una salida lateral debido a una manifestación de una decena de lealistas, que bloquearon las puertas. Ese mismo grupo increpó a Gerry Kelly, ministro de la Presidencia en el Ejecutivo de Belfast, cuando visitó a Adams en comisaría con insultos como «bastardo feniano».