Koldo LANDALUZE DONOSTIA

La red Tor, un universo paralelo en la «red profunda»

Demonizada y divinizada a partes iguales, la llamada «red profunda» es una especie de universo que circula paralelo a la consabida ruta que habitualmente utilizamos en internet. La red Tor es una puerta de entrada a este inhóspito y exclusivo punto de encuentro virtual.

En un universo tan inabarcable e imprevisible como es Internet, son infinidad los callejones paralelos que alberga este fascinante y, en ocasiones, inquietante punto de encuentro universal. Uno de los rincones más singulares es la denominada red Tor (The Onion Router), un punto de encuentro para miles de personas que acceden diariamente a un mundo clandestino de información. Desarrollada en 2003 y de la mano de un equipo de investigadores del Laboratorio de Investigación Naval de Estados Unidos, Tor es uno de los principales portales para acceder a esta «red profunda», que incluye entre sus características principales la posibilidad de encontrar información ajena a los motores de búsqueda comunes como Google o Yahoo. Según revela un estudio desarrollado por varios expertos en seguridad informática «en la red Tor es posible encontrar desde la colección completa de libros de Harry Potter, información difundida por activistas cibernéticos, venta de droga, pornografía infantil o redes de mercenarios. Hay gente que la usa para subir poesía como si fuera un simple blog o todo tipo de usuarios que la usan para subir `investigaciones censuradas'».

Básicamente se trata de una red de información, dentro de internet, que permite enviar y recibir información de manera codificada, lo que hace casi imposible definir el origen de los datos ni las identidades de los usuarios. Existen diferentes programas y plugins para navegadores que facilitan el uso de esta red y navegar por ella resulta más lento que en el modelo tradicional, ya que no vamos directamente hacia donde queremos sino que damos un pequeño rodeo virtual.

El programa oficial del Proyecto Tor -Tor Browser Bundle- es un código libre, funciona con todo tipo de sistemas operativos y está disponible en diversos idiomas. Además, incluye un navegador Firefox especialmente diseñado para transitar en esta red. Para acceder a ella se necesita este navegador especial porque las direcciones de los sitios no incluyen los consabidos dominios .com o .net, sino que usan la terminación .onion. Una puerta de entrada a ese otro universo paralelo denominado «Red profunda», tal y como suele ocurrir con este tipo de cuestiones, ha sido demonizado o laureado a partes iguales ya que, según la opinión de millones de usuarios, internet facilita que nos espíen, pero también nos otorga armas para luchar contra ello y una de las más requeridas es Tor.