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Diez sindicatos llevan al Gobierno español sus reivindicaciones en torno a los presos

Diez sindicatos vascos se han movilizado este viernes en Bilbo, ante la Delegación del Gobierno español, dentro de la iniciativa Izan Bidea de Sare, pare pedir un cambio en la política penitenciaria vigente y presentar una carta al Delegado del Gobierno en la CAV y el Subdelegado en Bizkaia.

Los sindicatos se han concentrado ante la delegación del Gobierno español en Bizkaia. (LAB Sindikatua)
Los sindicatos se han concentrado ante la delegación del Gobierno español en Bizkaia. (LAB Sindikatua)

Los sindicatos ELA, LAB, UGT, Steilas, ESK, CNT, CGT, EHNE, HIRU y Etxalde se han reunido este viernes ante la Delegación del Gobierno español en Bilbo para reivindicar un cambio en la política penitenciaria, dentro de la iniciativa Izan Bidea, de Sare. Además, estos sindicatos han registrado en la Subelegación del Gobierno español en Bizkaia una carta dirigida al delegado en la CAV, Denis Itxaso, y al subdelegado en Bizkaia, José Vicente Reyes, para que la resolución a la cuestión de los presos «avance definitivamente».

En el texto, los diez sindicatos firmantes destacan que durante los últimos dos años vienen haciendo «una lectura común en torno a la cuestión de la reincorporación de las personas presas», así como su compromiso con «el desarme de ETA, la problemática de las personas presas enfermas y el acercamiento».

En este sentido, los sindicatos reconocen que «se han dado pequeños pasos en los últimos meses», pero a su vez reivindican ante los representantes del Gobierno español que, en el contexto actual, «la resolución de la problemática de las personas presas sería una aportación necesaria a la convivencia democrática y a la reconciliación».

Además, abogan por «unos primeros pasos claros» para dar una resolución integral a esta problemática. Así, en relación a las personas presas aquejadas de enfermedades graves, recuerdan la solicitud realizada el pasado 5 de julio en la que pedían que las instituciones «tengan en cuenta la legislación vigente estatal y los estándares internacionales más exigentes, de tal modo que las personas penadas enfermas muy graves con padecimientos incurables puedan ser clasificados en tercer grado y ser excarcelados por razones humanitarias y de dignidad personal».

Los sindicatos exigen a los gobiernos español y francés «el acercamiento de la totalidad de las personas presas a cárceles vascas evitando un cumplimiento de penas privativas de libertad lejos de los lugares de arraigo social y familiar, facilitando la relación con sus familiares».

Finalmente, demandan la progresión de grado «sobre bases que respondan verdaderamente a las circunstancias de cada persona presa y su situación penitenciaria, tal y como «determina la legislación penitenciaria».