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Miami

La NASA pospone el primer vuelo del helicóptero Ingenuity sobre el suelo de Marte

La esperada hazaña del Ingenuity, el helicóptero que descendió hasta el suelo marciano incorporado al rover Perseverance, prevista para este domingo, ha quedado aplazada al menos una semana. Está preparando el primer vuelo de una aeronave terrícola en otro planeta. Serán 30 intensos segundos.

El Ingenuity, en esta imagen a unos cuatro metros del Perseverance, se prepara para su primer vuelo en Marte. (NASA/JPL-Caltech/MSSS-AFP)
El Ingenuity, en esta imagen a unos cuatro metros del Perseverance, se prepara para su primer vuelo en Marte. (NASA/JPL-Caltech/MSSS-AFP)

«Según los datos del helicóptero Ingenuity Mars que llegaron el viernes por la noche, la NASA decidió reprogramar el primer vuelo experimental del helicóptero (...) para no antes del 14 de abril», ha indicado este sábado el JPL, con sede en California (EEUU).

De acuerdo con el comunicado oficial, se ha detectado un fallo durante una prueba de giro de alta velocidad.

«El equipo de helicópteros está revisando la telemetría para diagnosticar y comprender el problema. Después de eso, reprogramarán la prueba a toda velocidad», ha señalado el JPL.

Homenaje a los hermanos Wright

Esta pequeña aeronave partió de Florida en julio de 2020 pegada al vientre del Perseverance, el rover que aterrizó el pasado 18 de febrero en el cráter Jezero del Planeta Rojo, tras un descenso de riesgo a alta velocidad en siete minutos y después de cruzar la tenue atmósfera de Marte.

El español José Antonio Rodríguez Manfredi, responsable de una pequeña estación meteorológica instalada a bordo del Perseverance, indicó el viernes a Efe que será como repetir la proeza de los hermanos Wright.

Este helicóptero, de un tamaño similar a un balón de fútbol y que pesa 1,8 kilogramos, lleva debajo de sus rotores un pequeño trozo de tela de las alas del avión original con el que Wilbur y Orville Wright efectuaron el primer vuelo controlado.

«Es un gesto histórico para unir esos dos momentos especiales, ese vuelo pionero de los hermanos Wright hace 118 años y este primer vuelo en otro planeta», precisó.

En 1903, los Wright lograron que un aparato más pesado que el aire, controlable y con motor se sostuviera en vuelo durante 59 segundos en la playa Kitty Hawk, en Ohio (EEUU).

Casi 20 segundos de desfase con la Tierra

Rodríguez Manfredi explicó que la idea es que Ingenuity se levante unos 5 metros, se mantenga en el aire durante 30 segundos y descienda. Prevén que realice otros cinco vuelos más largos a lo largo de un mes.

«Es un reto de ingeniería, un reto de la ciencia en general, y vamos a aprender muchísimo»,  comentaó el experto.

Los «18-19 minutos» de desfase en las comunicaciones entre ambos planetas es un lapso suficiente para dificultar el control de la aeronave en tiempo real.

«No podemos pilotarlo como lo hacemos aquí con un dron, no podemos decirle ‘acelera’, ‘a la derecha’, ‘a la izquierda’», añadió.

Desde el Laboratorio de Propulsión de la NASA (JPL) en California, envían órdenes generales sobre elevación y aceleración, entre otras, que son apenas «parámetros» para que Ingenuity «gestione su propio vuelo».

Esas señales van primero al rover Perseverance y este se las envía al helicóptero. Después repiten la operación a la inversa para enviar la respuesta a la Tierra. «Toda una coreografía, como si fuera una obra de ballet», señaló Rodríguez Manfredi.

Menos atmósfera, más velocidad de giro

El desafío del primer vuelo parte del hecho de que la densidad de la atmósfera marciana sea el 1% de la terrestre, lo que hace que las aspas del helicóptero carezcan del mismo apoyo para impulsarse, para elevarse.

Por eso, Ingenuity tiene que hacer girar sus aspas mucho más rápido que lo que lo haría en la Tierra para conseguir suficiente elevación.

En este intercambio de información se prevé que el vehículo envíe además las primeras imágenes del rover Perseverance «desde el aire», lo que será «otro momento realmente histórico».

El especialista está muy orgulloso de que la estación meteorológica MEDA, a su cargo, contribuirá a este vuelo con el análisis de la condiciones en la atmósfera marciana.

«Si aquí en la Tierra necesitamos conocer los vientos, las tormentas, para hacer un vuelo Madrid-Nueva York, por ejemplo, pues en Marte todavía más», destacó.