El Ministerio de Sanidad israelí ha decidido este jueves comenzar a aplicar una tercera dosis de la vacuna contra el covid-19 a personas mayores de 60 años. El anuncio lo ha hecho el primer ministro, Naftali Benet.

«A partir de este domingo, los hospitales y los centros de salud permitirán que la población mayor reciba una tercera dosis», ha precisado Benet durante un discurso televisado, en el que ha señalado que esta decisión «se ha basado en abundante investigación y análisis», así como en el «riesgo que presenta la variante delta».

«Pido a todas las personas mayores ya vacunadas que acepten esta dosis complementaria; protéjanse», ha incidido el primer ministro, que ha asegurado que «pocos días después de la tercera dosis tendrán más defensas inmunitarias». «Las vacunas protegen de la mortalidad, como sucede con la vacuna contra la gripe, que hay que volver a recibir cada cierto tiempo», ha explicado.

«Compartiremos toda la información que tengamos con el resto de la comunidad internacional a medida que avancemos», ha añadido. Y es que Israel se convertirá así en el primer Estado que aplicará la tercera dosis de forma sistemática.

Un debate que se ha inclinado hacia la tesis de Pfizer

Hasta la fecha, 5.775.845 personas han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus en Israel, de las cuales 5.346.013 –aproximadamente el 55% de la población– han sido inoculadas con la segunda, por lo que cuentan con la ‘pauta completa’, mayoritariamente con la fórmula de Pfizer.

Esta tercera dosis será administrada a aquellas personas que superen la edad mínima establecida (60 as) y que hayan recibido su segunda dosis hace al menos cinco meses.

Esta medida llega tras un extenso debate en el que han participado expertos y políticos israelíes. Y también después de que este miércoles Pfizer indicara que una tercera dosis de su vacuna puede «impulsar con fuerza» la protección contra la variante delta.

La decisión ha contado en todo momento con el apoyo de un mayoría absoluta, aunque han existido diferencias en torno a la edad a partir de la cual se debe iniciar este refuerzo en la vacunación, según ha informado ‘The Times of Israel’.

Hace poco más de dos semanas, el Ministerio de Sanidad israelí ya había autorizado la administración de una tercera dosis a personas adultas inmunodeprimidas. Desde entonces, según ha informado este jueves el propio Benet, 2.000 personas ya han recibido el refuerzo.

Más casos pero con menor gravedad

Tras algunos meses de cuasinormalidad, Israel, uno de los estados que más rápido logró vacunar a un alto porcentaje de su población, volvió a aplicar algunas restricciones a fines de junio tras registrar un lento pero repentino aumento en los contagios.

A principios de esta semana, los nuevos casos diarios se han colocado por encima de los 2.000, una cifra muy superior a las que se habían manejado en los últimos meses y que incluye a personas vacunadas.

La cifra de casos activos ha superado este jueves los 15.000, mientras que la cantidad de pacientes en estado grave sigue siendo baja, con 159, de los que 33 están en estado crítico.

Como consecuencia de este aumento de contagio, provocado por la propagación de la variante delta, a partir de hoy vuelve a regir el sistema conocido como Pase Verde, por el cual solo la población vacunada, recuperada o con pruebas negativas puede acceder a determinados lugares.

Además, en las últimas semanas las autoridades han endurecido las restricciones para quienes regresen desde el exterior, expandido la lista de países a los cuales está prohibido viajar y postergado la entrada de turistas, vetada desde el comienzo de la pandemia y que estaba prevista para este mes.