NAIZ+

Carola Rackete, el símbolo de los derechos de las personas migrantes que mueve conciencias

El arresto de la capitana del barco humanitario Sea Watch 3, Carola Rackete, ha provocado una ola de solidaridad que no encuentra fronteras. Las calles y las redes sociales demandan su puesta en libertad.

La capitana del barco de la ONG Sea Watch, Carola Rackete, siendo trasladada a una comisaría de Lampedusa. (Anaelle LE BOUEDEC/AFP)
La capitana del barco de la ONG Sea Watch, Carola Rackete, siendo trasladada a una comisaría de Lampedusa. (Anaelle LE BOUEDEC/AFP)

Las protestas por la detención de la joven alemana al mando del barco después de que desembarcara en Lampedusa a 40 migrantes extenuados tras permanecer 17 días bloqueados a bordo, crece tanto en la calle como en las redes sociales. La joven de 31 años se ha convertido en símbolo de la defensa de los derechos de las personas migrantes.

Una vez en territorio italiano, la capitana fue arrestada por la policía italiana, mientras un pequeño grupo de extrema derecha le gritaba todo tipo de insultos racistas. La comandante, con experiencia por haber navegado en barcos rompehielos en el Ártico y la Antártida, sabía que se enfrentaba a la cárcel, pero ahora puede ser condenada a hasta 10 años de prisión por «resistencia a un navío de guerra».

Hoy se conocerá el destino de Carola Rackete. El arresto de la capitana del Sea Watch 3 también ha generado el enfrentamiento diplomático entre Italia y Alemania.

La solidaridad internacional no se hizo esperar tras su arresto. En pocas horas, se ha recaudado miles de euros en una campaña on line para sufragar sus gastos legales. Las protestas también han tomado las calles y los consulados italianos en algunas ciudades.