La jueza de la sección Primera de la Audiencia de Bizkaia, Reyes Goenaga, ha condenado a Seidel M.G. a 32 años y diez meses de cárcel por matar a Cristina Estébanez en diciembre de 2010 en Barakaldo.

La sentencia también le condena a pagar una indemnización de 130.000 euros al padre de la fallecida y 90.000 euros para el nuevo compañero sentimental de la joven, a quien también intentó matar, y establece sendas órdenes de alejamiento hacia ambos.

Seidel M.G. fue declarado «culpable de asesinato» en el juicio que tuvo lugar con jurado popular.

Según explica la jueza, el crimen hacia su antigua pareja se produjo después de que ella le hubiera denunciado por malos tratos «y otros episodios de acoso y agresiones», lo que llega a considerar «una mayor gravedad del hecho, que responde a erróneas concepciones de pertenencia y dominación sobre la mujer que debías estar superadas en nuestra sociedad, e incrementan intensamente el reproche social de la conducta».

Por la «tentativa de asesinato», la jueza le impone trece años y enmarca el ataque al nuevo novio de la chica «en la misma dinámica de violencia contra la mujer».

Además, la jueza ha decidido deducir testimonio de uno de los testigos, un joven amigo del acusado, que «incurrió en graves contradicciones sobre elementos relevantes» para tratar de exculpar a su amigo.