Joseba ITURRIA
BELLEGARDE VALSERINE

Sky resiste todos los ataques

Vandenbroeck, Nibali y Evans pusieron a prueba al equipo inglés, que no necesitó desgastar a Froome para controlar la carrera. Voeckler ganó la etapa tras ser el más fuerte de una fuga con la que Egoi Martínez acabó séptimo.

Thomas Voeckler fue el vencedor de la etapa. (Pascal PAVANI/AFP PHOTO)
Thomas Voeckler fue el vencedor de la etapa. (Pascal PAVANI/AFP PHOTO)

«¡Atáquenle!» Reclamaba el titular de primera página de ayer de ‘L'Equipe’ sobre una foto de Bradley Wiggins. Le atacaron todos, los corredores en la carretera y un periodista después, pero el Sky y su líder resistieron todos los ataques sin necesidad de desgastar a Froome y de que le ayudara ningún otro equipo.

Solo Lotto se dejó ver en cabeza del pelotón antes de la Grand Colombier de manera testimonial y RadioShack en los últimos kilómetros, aunque demasiado tarde. El ataque de Vandenbroeck no perjudicaba a Wiggins y sí a Haimar Zubeldia y Monfort, que cedieron 32 segundos valiosos en una etapa donde no debieron perder ninguno ante el flamenco cuando tenían cinco corredores en el primer grupo.

Los intentos más inquietantes para el Sky fueron los de Nibali y Evans, que lo probaron en la bajada del Grand Colombier, porque en la subida se bastaron Boasson Hagen para poner el ritmo y Porte para responder a los ataques de Vandenbroeck.

El ataque más fuerte fue el de Nibali, que contó con el apoyo de Sagan, superviviente de la fuga. Juntos sacaron un minuto al grupo en el que tiraba Rogers, pero tras acabar el descenso la carretera picaba hacia arriba y el eslovaco no pudo ayudarle más y el italiano bajó su ritmo y fue atrapado. Evans lo intentó en el último kilómetro, pero Wiggins no soltó su rueda.

Y también tuvo que responder a un periodista, que no dio por buena su decisión de no hablar más de la comparación con el US Postal y las sospechas de dopaje y le dijo que como líder debe justificarse. Wiggins recordó su trayectoria, con títulos olímpicos y mundiales, y puestos entre los cuatro primeros en Tour y Vuelta y que este año ha pasado cantidad de controles al ganar casi todo lo que ha corrido y que no debe justificarse.

Una fuga consentida

La etapa siguió el guión perfecto para el Sky, que concedió permiso a una fuga de 25 corredores en la que el mejor clasificado era Scarponi (Lampre) a 10.27 y el segundo Egoi Martínez, que confirmó con hechos las emotivas palabras que los cinco supervivientes de Euskaltel trasmitieron en su carta del martes.

Su problema fue que el Grand Colombier presentaba dos zonas muy duras para un corredor de sus características. En la primera aceleró Scarponi y pudo volver a enlazar en el descanso que la separaba de la segunda. Pero Voeckler, el más fuerte, aprovechó ese último tramo duro para seleccionar el grupo y con él solo aguantaron Luis León Sánchez (Rabobank), Devenyns (Omega) y Scarponi.

Por detrás coronaron a un minuto Egoi, Casar (FDJ), Fofonov (Astana), Peraud (Ag2r) y Voigt (RadioShack), que se lanzó en el descenso y consiguió enlazar con los de adelante para disputarse la victoria los cinco. Devenyns atacó de lejos, Voigt contraatacó y Voeckler volvió a ser el más fuerte en los dos kilómetros finales en subida. Egoi acabó séptimo mientras sus compañeros cedieron más de 27 minutos. Gorka Izagirre renunció a una buena general y llegó en el último puesto. Señal de que hoy le toca coger la fuga camino de la Madeleine porque es el único naranja que puede optar a ganar en La Toussuire.