El colectivo de familiares y allegados de presos políticos ha celebrado una concentración en el exterior de la Basílica de Loiola, en Azpeitia, bajo el lema «Etxean eta bizirik nahi ditugulako, Iosu etxera orain».

Integrantes de este colectivo han entregado a la consejera de Educación de Lakua, Isabel Celaá, que ha asistido a la recepción de autoridades, un informe en el que se plasma la situación del preso arrasatearra y otros 13 presos vascos que padecen enfermedades graves

Con este acto, Etxerat ha querido trasladar su preocupación por Uribetxebarria y exigir su puesta en libertad inmediata, ya que le diagnosticaron en 2005 un cáncer de riñón, y su enfermedad «ha entrado en fase irreversible».

El portavoz de este colectivo, Elías Miner, ha asegurado que, durante este tiempo, su diagnóstico «ha empeorado». En este sentido, ha criticado que el Gobierno español cree que, con acercar a este preso «es suficiente», pero ha considerado que «no se trata» de que se proceda a su acercamiento, «sino de que le pongan en libertad».

A su juicio, «no puede ser que se defiendan todos los derechos humanos, pero se hagan diferentes niveles entre víctimas», y ha considerado que, «por dejadez o desidia, esta persona que tenía que estar libre en 2006» se encuentre todavía en prisión.

En esta línea, ha pedido que se haga «todo lo posible» para que el preso arrasatearra pueda volver a su casa porque, durante este tiempo «se le ha negado el derecho a la salud, pero no puede negársele ahora, ni a él ni a sus familiares, el derecho a recorrer este último tramo de su enfermedad en compañía de los suyos».

Por ello, ha emplazado a que se le ponga «en inmediata y urgente libertad, porque, por Ley y por derecho, le corresponde». Además, ha hecho un llamamiento a la sociedad vasca y a los agentes políticos, sociales y sindicales para que participen en la manifestación que han convocado el próximo sábado, día 5 de agosto, en Arrasate a las 17.30.