Maider EIZMENDI
Errenteria

Errenteria abre el camino para la convivencia y la reconciliación

Víctimas de ETA y de la violencia del Estado han compartido sus relatos dentro del ciclo de cine y de teatro Eraikiz.

Muruetagoiena, Asla, Agirre, Rodero y Espiau en la sala Niessen. (Jon URBE / ARGAZKI PRESS)
Muruetagoiena, Asla, Agirre, Rodero y Espiau en la sala Niessen. (Jon URBE / ARGAZKI PRESS)

El auditorio de Centro Cultural Niessen de Errenteria se convirtió el sábado por la noche en el centro de atención sobre el debate de la convivencia y la reconciliación. La proyección del documental «Hablan los ojos» de Gorka Espiau y el posterior coloquio con los protagonistas de la cinta, demostró a las personas presentes que un escenario en el que víctimas tanto de ETA como de la violencia del Estado compartan sus relatos y sean capaces de llegar a acuerdos es factible.

La cuarta y última sesión del ciclo de cine y teatro Eraikiz reunió en el escenario a cuatro de los protagonistas del documental: Rosa Rodero, viuda del ertzaina Joseba Goikoetxea; el ex miembro de ETA y preso durante 18 años Joxean Agirre; a Jon Asla, tío de Fabio Moreno –muerto con dos años en un atentado de ETA-; y a Tamara Muruetagoiena, hija del médico Esteban Muruetagoiena fallecido tras permanecer en manos de la Guardia Civil durante 10 días.

Tras la proyección del documental, los organizadores cedieron la palabra al público, ávido de saber la opinión de los protagonistas sobre sus propias experiencias, sobre su visión acerca del tratamiento que han de recibir las víctimas del conflicto o sobre la importancia del relato de lo ocurrido.

Tal y como resaltó Agirre a este respecto, por encima de la percepción que cada persona tenga sobre lo sucedido, «es fundamental sedimentar por encima de las ideas»; una labor que «corresponde a la sociedad, pero también a los representantes políticos». En la misma línea se manifestó Asla que consideró que es necesario «sacrificar los sentimientos que tienen cada uno, para no envenenar los sentimientos de otras personas», refiriéndose especialmente a las generaciones venideras.

Los protagonistas del documental no quisieron finalizar su alocución sin agradecer la iniciativa impulsada por todos los partidos políticos representados en el Ayuntamiento de Errenteria, que han aunado fuerzas en la organización de este ciclo.