La Comisión Europea (CE) ha hecho público el segundo informe de evaluación del rescate bancario para el Estado español elaborado por el Ejecutivo comunitario en colaboración con el Banco Central Europeo (BCE), que recoge las conclusiones de los inspectores que viajaron a Madrid del 28 de enero al 1 de febrero.

En sus recomendaciones, Bruselas admite que la subida del IVA que se aplica desde el pasado mes setiembre (del 18% al 21% el tipo general y del 8% al 10% el tipo reducido) supone un «progreso» para mejorar la eficacia del sistema fiscal español. «No obstante, todavía hay margen para limitar la aplicación de diferentes tipos de IVA reducido y para aumentar los impuestos medioambientales, especialmente a los carburantes», sostiene el informe.

En materia presupuestaria, la CE pide «reforzar» y aplicar de forma más estricta la ley de estabilidad presupuestaria. «La aplicación de las disposiciones de la ley por lo que se refiere a los mecanismos correctivos y de alerta temprana podría hacerse más eficaz y transparente», sugiere.

El informe critica que los planes del Gobierno español para poner en marcha una oficina presupuestaria independiente, exigida por la UE «todavía están en una fase preparatoria» y señala que. «deberán acelerarse considerablemente si se quiere que la oficina juegue un papel eficaz ya para el ejercicio presupuestario 2014».

Aumentar la edad de jubilación

En materia de pensiones, el Ejecutivo comunitario reclama que «el recurrente déficit en el sistema de seguridad social también debe controlarse», pide Bruselas. En 2012, este déficit ascendió al 1% del PIB, en lugar del equilibrio que había calculado el Gobierno. «Los planes para introducir un factor de sostenibilidad en el sistema de pensiones y para aumentar la edad efectiva de jubilación serían un paso importante en esta dirección, pero todavía deben adoptarse», recomienda la Comisión.

El informe constata que la reforma laboral aprobada por el Gobierno del PP el año pasado «podría estar empezando a tener un impacto», como puede observarse en la moderación salarial y el aumento de los despidos procedentes, pero no obstante Bruselas señala que «la dualidad en el mercado laboral persiste sin cambios» y dice que «la gravedad de la situación del mercado laboral exige una vigilancia y revisión continua del impacto de la reforma».

En otro punto, Bruselas lamenta que todavía no se haya aprobado la «importante ley» de liberalización de servicios profesionales y pide que el grado de «ambición» de la ley de mercado único «no se reduzca durante el proceso legislativo».