Representantes de la asociación y de Tilin Talan Haur Eskolak, organizadores estos últimos de la iniciativa, coinciden en señalar que el día está siendo «increíble».

La coordinadora, Marta Elipe, remarca el gran trabajo de las propias niñas y niños, que han realizado «su baile», están vendiendo pulseras cosidas por ellos mismos, han diseñado el logo... «El dinero recogido será para Nahia [necesita 10.000 euros para someterse a un tratamiento en China, para mejorar su calidad de vida e impulsar el estudio]. Pero también nos quedamos con que nuestros niños valoren la suerte de que estén bien y que se den cuenta de que divirtiéndose, pueden ayudar muchísimo», declara Elipe, que también valora positivamente la aportación de comercios, empresas, clubes y ciudadanos. En el momento de la entrevista, seguían recibiendo regalos para la tómbola –iban por 1.500...–, que es solo una actividad dentro de una jornada plena.

Joxe Mari Olasagasti, rodeado de pequeños que le pedían autógrafos en trozos de madera, ha expresado al acabar su exhibición que había venido con toda su ilusión. Ha contado que los padres de Nahia, que viven a la entrada de Igeldo, son sus amigos y que cuando conoció el caso decidió poner su grano de arena. «Cuando sucede una cosa así, te das cuenta de que falta algo en el mundo. A ver si conseguimos sacar la ayuda adelante… Necesitamos ayuda y solidaridad». Participar en un evento de estas características es una bonita experiencia para el aizkolari, teniendo en cuenta, además, que disfruta con los txikis.

Antes de entrar a la plaza se vislumbra y se escucha el ambiente formado ante la Diputación. Más de 250 niñas y niños del programa Summer Udalekuak participan en esta iniciativa, desde los más pequeños –de dos años– a los mayores –de 12 años–. Nos cuentan que estaban muy nerviosos. «¿Qué vamos a hacer?», preguntaban. Han trabajado el caso de Nahia de Cos y todos han entendido que ayudan a una niña que está enferma.

«Los txikis merecen mucho, gracias a ellos se está acercando la gente», apunta Iñigo, de la asociación Gure Nahia Elkartasuna. Se muestra muy agradecido también por la labor de toda la gente de Tilin Talan y por toda la solidaridad que están recibiendo. Se han acercado el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, y otros representantes de esta institución y antes de que abrieran la tómbola una mujer quería hacer su aportación. Iñigo comenta que los ciudadanos les están ayudando incluso sin coger ningún boleto.

Informa de que no es la única actividad por Nahia de Cos y otros niños con enfermedades raras. Por ejemplo, durante el año suben montañas emblemáticas de Gipuzkoa –llevan seis y les quedan otras seis–. La asociación quiere extender su mano a otras familias, porque «hay 1001 Nahias».