El encuentro ha comenzado con un UCAM fluido en ataque para cobrar las primeras ventajas (10-4), lo que ha obligado a Rafael Pueyo a parar el encuentro muy pronto. La reacción visitante ha llegado de la mano de Germán Gabriel y con un triple de Álex Mumbrú los bilbainos se han puesto por delante por primera vez en el partido (17-18), renta que han mantenido hasta finalizar el primer cuarto (22-23).
En el segundo periodo el Bilbao Basket ha vuelto a atascarse en ataque, anotando solo cinco puntos en seis minutos. Esa dificultad para ver aro y cuatro triples convertidos por el UCAM han aupado al conjunto dirigido por Óscar Quintana (36-28).
Sin embargo, el encuentro se jugaba a ráfagas y un parcial de 0-9 favorable a los hombres de negro -hoy de blanco- ha vuelto a poner el choque en un pañuelo y así se ha llegado al intermedio con las espadas en todo lo alto (39-38).
Tras el descanso el partido ha seguido siendo un carrusel, del que han salido mejor parados los visitantes, que han pasado de ir perdiendo por cinco y con malas sensaciones (48-43) a ganar por esa misma diferencia en un abrir y cerrar de ojos (48-53).
En ese instante la aportación de Fran Pilepic ha resultado clave. El croata ha asumido la responsabilidad desde el perímetro con cuatro triples seguidos y 16 puntos en el cuarto, cuando en la primera parte había hecho solo tres puntos, y su equipo se ha marchado con 11 puntos de renta (53-64).
En el último período, pese a que el UCAM ha fallado seis tiros libres seguidos, se ha metido de lleno en el partido a falta de cinco minutos para la conclusión (67-66).
Jordi Grimau y el brasileño Augusto Lima, por los de casa; y Raúl López y Pilepic, por los de Bilbo, han dado un paso al frente y se ha llegado a la hora de la verdad con todo por decidir. Ha sido entonces cuando ha aparecido Wood, muy fallón durante todo el encuentro, pero que ha metido dos triples para darle la victoria a su equipo (78-77).