NAIZ
GASTEIZ

Lakua, diputaciones y Eudel firman un plan para aumentar los 18.000 nacimientos anuales en la CAV

Lakua, las diputaciones de Bizkaia, Araba y  Gipuzkoa y la Asociación de Municipios Vascos (Eudel) han suscrito el Pacto por la Familia y la Infancia que, entre otras medidas, busca aumentar la natalidad en Euskadi para incrementar los actuales 18.000 nacimientos anuales. Entre otras medidas, recogerá un incremento de dos a tres anualidades en las ayudas por segundo hijo

Lakua, las diputaciones y Eudel han firmado el Pacto por la Familia y la Infancia. (Juanan RUIZ / ARGAZKI PRESS)
Lakua, las diputaciones y Eudel han firmado el Pacto por la Familia y la Infancia. (Juanan RUIZ / ARGAZKI PRESS)

El lehendakari, Iñigo Urkullu, los diputados generales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Ramiro González, Unai Rementeria y Markel Olano, respectivamente, y el presidente de Eudel, Imanol Landa, han ratificado este acuerdo que ya fue aprobado el 20 de diciembre pasado por el Consejo Vasco de Familia.

Este pacto se concretará en un plan de actuación para esta legislatura para apoyar a las familias y a la infancia que se aprobará a lo largo del primer trimestre de este año y que, entre otras medidas, recogerá un incremento de dos a tres anualidades en las ayudas por segundo hijo, lo que supondrá un desembolso adicional de hasta cinco millones de euros al año.

El lehendakari ha hablado del reto de desarrollar políticas de carácter social, cultural y económico que «afronten el progresivo envejecimiento de la población y la necesidad de fomentar la natalidad». En la CAV nacen al año unos 18.000 niños, la edad media de maternidad es de 33,4 años y la tasa de fecundidad es de 1,39 hijos.

Ha explicado que con este plan se pretende «invertir en la infancia, generar condiciones que favorezcan la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, facilitar los procesos de emancipación de los jóvenes, apoyar a las familias con hijos y facilitar el acceso de las mujeres al empleo de calidad».

Entre otros aspectos se pretende« garantizar unos recursos económicos mínimos a todas las familias con hijos y prevenir la pobreza infantil, facilitar que los padres y madres puedan dedicar todo el tiempo necesario a sus hijos, favorecer que todos los niños puedan recibir servicios de atención de calidad de manera accesible y asequible, y reorientar las políticas educativas para profundizar en un sistema escolar inclusivo y coeducador».

Asimismo, las instituciones quieren también «sensibilizar» a los agentes privados relacionados con estas materias, en especial los implicados en las relaciones laborales, como sindicatos y patronal, para que puedan llevarse a efecto.