En una nota, la central califica esa noticia de «dura e injusta y que una vez más sitúa a toda una plantilla de trabajadores/as frente a la tesitura de tener que defender sus puestos de trabajo y el futuro de la fábrica».

Añade que, una vez más, «las decisiones de una multinacional han provocado que no haya habido alternativa al principal producto que fabricaba cuando la obsolescencia de ese producto era una realidad conocida por todos/as desde hace más de una década».

Considera que la multinacional «es la única responsable de esta situación y ningún trabajador/a debe ser despedido por un problema generado única y exclusivamente por la malas decisiones de la multinacional y de sus gestores».

Por ello, desde LAB se exige «el inicio de un proceso que garantice los volúmenes de trabajo suficientes para dar ocupación a los trabajadores/as que la multinacional pretende despedir en KSS Orkoien».

Por tanto, desde el sindicato instan «por última vez a la multinacional a sentarse en la mesa y hablar de soluciones en la dirección de la propuesta de fusión con Kybse Ororbia planteada por LAB en julio; hablar de solución y no de despidos; hablar de futuro y no de planes que nunca llegan; hablar de personas y no de números».

Finalmente, señala que «si se produce un sólo despido en KSS Orkoien, propondremos respuesta contundente desde Kybse Ororbia ya que entenderíamos que la multinacional no tiene voluntad real de solucionar el problema».