@MartxeloDiaz

Los informes de las defensas pondrán punto final al juicio de Altsasu en la Audiencia Nacional

La exposición de las conclusiones de las defensas de los ocho acusados pondrá punto final al juicio contra los jóvenes de Altsasu que se han desarrollado en las tres últimos en la sede de la Audiencia Nacional española en San Fernando de Henares.

Las abogadas Amaia Izko y Jaione Karrera, junto a allegados de los jóvenes de Altsasu a las puertas de la Audiencia Nacional española. (NAIZ)
Las abogadas Amaia Izko y Jaione Karrera, junto a allegados de los jóvenes de Altsasu a las puertas de la Audiencia Nacional española. (NAIZ)

Tras un receso de una semana, el juicio contra los jóvenes de Altsasu se retomará hoy, a partir de las 10.00, con la intervención de los seis abogados encargados de la defensa de los ochos jóvenes. En principio, concluirá hoy.

La semana pasada, la vista concluyó con las exposiciones de la Fiscalía y las diferentes acusaciones, que mantuvieron la calificación de «terrorismo» de los hechos, basándose en un informe de la Guardia Civil que atribuye a ETA el diseño de una estrategia para reclamar la marcha de la Guardia CIvil de Euskal Herria. El fiscal José Perals llegó a señalar que «antes mataban, ahora hacen carrozas de Carnaval, pero la estrategia es la misma». El informe de la Guardia Civil defendía que ETA ordenó a Gestoras Pro-Amnistía y Askatasuna y al movimiento juvenil organizar actividades para conseguir un clima que haría imposible la continuidad de la presencia del instituto armado en Euskal Herria a través de la «campaña Alde Hemendik». Para ello, se habría puesto en marcha un colectivo llamado Alde Hemendik, que tendría una versión local en Altsasu llamada Ospa.

Los ocho acusados, según la versión del fiscal, habrían preparado una emboscada a los guardias y a sus novias en el bar Koxka. Sin embargo, no hay prueba física que acredite este hecho. La tesis de Fiscalía y acusaciones destaca que utilizaron sus teléfonos móviles para quedar para ir a pegar a los guardias. Sin embargo, no hay prueba de ello. El único asidero de las acusaciones es que se borraron datos de algunos móviles. De ahí dan el salto de que lo que se borró es precisamente el rastro de preparar el ataque. Pero sin nada que lo sustente.

Una de las características de este juicio es que las acusaciones y las defensas se basan en declaraciones de las víctimas, de los acusados y de testigos de los hechos. Según los primeros, sufrieron un ataque premeditado por parte de de decenas de personas. Sin embargo, quienes estaban trabajando en el Koxka no vieron esa horda, sino una discusión que desembocó en empujones. Algunos de los acusados niegan incluso estar en el Koxka en esos momentos, como Adur Ramirez de Alda, quien pudo presentar en última instancia un vídeo en el que aparecía en el frontón Burunda con una ropa diferente a la que señalaban los acusadores.. Quienes estaban niegan haber golpeado a los guardias.

Las dimensiones del Koxka no permiten que decenas de personas se congreguen a la entrada, como señalaban las acusaciones. Incluso, forenses de la defensa desacreditaron la versión de las víctimas de que padecieron graves lesiones, contradiciendo los informes médicos presentados por las acusaciones, llenos de contradicciones por otra parte.

Pero la única evidencia física es el vídeo que grabó Iñaki Abad en el exterior del bar Koxka, que inicialmente no fue admitido por la Sala. En el mismo puede verse, por ejemplo, que la camisa que vestía el sargento estaba impoluta y no llena de pisotones como él mismo declaró. El fiscal Perals trató de desacreditar, sin ninguna base ni prueba, la veracidad del vídeo, señalando que «hoy con Photoshop se puede hacer cualquier cosa».

Amaia Izko, una de las abogadas de la defensa, señaló a las puertas de la Audiencia Nacional el pasado jueves, tras concluir la sesión , que el intento de desacreditar el vídeo por parte del fiscal se debe a que complica la acusación de «terrorismo» que mantiene. Asimismo, señaló que su discurso fue «anacrónico» y «alambicado» al tratar de vincular a ETA con lo sucedido en el Koxka.