Alaphilippe ha llegado a meta en solitario, adjudicándose la primera jornada en los Pirineos, con 15 segundos de renta sobre el guipuzcoano Gorka Izagirre (Bahrein), el británico Adam Yates (Mitchelton) y el holandés Bauke Mollema (Trek).
«No hay que darle más vueltas, esto es así. He hecho todo lo que he pedido, pero no ha podido ser», ha lamentado Gorka Izagirre, que junto a su hermano Ion suma ya tres segundos puestos en la ronda gala.
Tras muchos kilómetros inmerso en el grupo de escapados, el líder de la montaña ha cimentado su victoria ha sentenciado su victoria en el último tramo de la subida al Col de Portillon y en una temeraria bajada de diez kilómetros hasta Bagnères-De-Luchon.
Es la segunda etapa para Allaphillippe, que ya se impuso hace una semana en el debut de los Alpes, en la meta de Le Grand Bornand.
El grupo de los favoritos ha llegado a casi nueve minutos. Mikel Landa ha intentado arañar unos segundos en el último descenso pero no se lo han permitido y no hay cambios en los primeros puestos, con Geraint Thomas en lo alto.
Por otro lado, el eslovaco Peter Sagan (Bora) ya se ha asegurado matemáticamente su maillot verde y solo necesita llegar a París para vencer por sexta vez el premio a la regularidad.
Caída de Gilbert
La jornada ha vivido un gran susto con la caída de Philippe Gilbert (Quick Step) en el descenso del Portet d'Aspet, al salirse en una curva y volar por encima del quitamiedos.
We've all been very scared, but @PhilippeGilbert is ok and will go back on the bike. 💪
— Le Tour de France (@LeTour) July 24, 2018
Après une grosse frayeur, @PhilippeGilbert semble aller bien et va repartir. 💪#TDF2018 pic.twitter.com/Xtrjyw3QSf
La caída ha sido de dos o tres metros, pero afortunadamente ha salido con algunos rasguños y aparentemente sin heridas de mayor trascendencia, por lo que ha continuado en carrera.
Antes, la carrera ha tenido que ser paralizada por la protesta de unos agricultores.
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