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Donostia

Eneko Goia destaca la «alta participación» en fiestas y rechaza las agresiones sexuales

El alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha destacado el «buen ambiente» y la alta participación en las actividades de Aste Nagusia donostiarra «también en los barrios», al tiempo que ha alertado del incremento del número de hurtos, sobre todo de teléfonos móviles. Entre las «sombras» ha destacado las agresiones machistas.

Eneko Goia alkatea eta Donostiako udal taldeetako bozeramaileak, aurreko agerraldi batean. (DONOSTIAKO UDALA)
Eneko Goia alkatea eta Donostiako udal taldeetako bozeramaileak, aurreko agerraldi batean. (DONOSTIAKO UDALA)

Goia ha hecho un balance del desarrollo de las fiestas de Donostia, en el que ha valorado que están transcurriendo «con muy buen ambiente, con muy buena participación de público y con normalidad». Ha explicado que la alta participación se está registrando también en los barrios, gracias al esfuerzo del Ayuntamiento por «proyectar el ambiente festivo» a otras zonas de la ciudad, donde la gente «está respondiendo», como en el caso del Festara descentralizado que se ha llevado a cabo este año por primera vez y que podrá extenderse a próximas ediciones.

El primer edil ha citado también las «sombras» de las fiestas, entre las que ha destacado los episodios de ataques contra la libertad sexual de las mujeres, un problema ante el que «no hay que bajar la guardia».

También ha destacado que en los partes de sucesos que recibe cada mañana ha constatado un incremento del número de hurtos, sobre todo de teléfonos móviles, por lo que ha solicitado a los ciudadanos que mantengan «alta la guardia» y vigilen sus pertenencias, sobre todo en las grandes aglomeraciones.

Del mismo modo, ha mencionado el «triste suceso» ocurrido en la madrugada del día 12, cuando un vecino de Urnieta fue víctima de una agresión que le causó heridas graves y le mantienen en estado de coma en el Hospital Donostia. Goia ha transmitido un mensaje de «solidaridad» a la familia de la víctima y el deseo de que «pueda recuperarse» de sus graves heridas.