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BRUSELAS

Los Veintiocho logran un acuerdo sobre el reparto de las posibilidades de pesca de 2019

Los ministros de Pesca de la Unión Europea han logrado, tras casi diecisiete horas de negociación, un acuerdo para el reparto de las posibilidades de pesca de la flota comunitaria en el Atlántico y el Mar del Norte a lo largo de 2019.

Un barco se dirige al puerto de Ondarroa durante la campaña de la anchoa. (Gorka RUBIO/FOKU)
Un barco se dirige al puerto de Ondarroa durante la campaña de la anchoa. (Gorka RUBIO/FOKU)

El consenso entre las capitales europeas ha llegado pocos minutos antes de las 3.00 de este miércoles, después de que los ministros del ramo reiniciaran los debates a las 10.00 del martes y, posteriormente, comenzasen las negociaciones bilaterales entre delegaciones nacionales y con el Ejecutivo comunitario.

En concreto, las posibilidades para la flota de pesca de merluza en el Cantábrico y Golfo de Cádiz, de gran valor comercial, permanecerán en las 5.924 toneladas, el mismo nivel que en 2018, terminando así con cuatro años consecutivos de reducciones por su mal estado. A su vez, las capturas de esta especie en el Golfo de Bizkaia se incrementarán un 22,7%, hasta las 16.037 toneladas, mientras que su pesca en caladeros del Gran Sol crecerá un 27,5% (23.512 toneladas).

También aumentan las posibilidades de pesca de gallo en caladeros estatales (+35%), aguas del Gran Sol (47,3%) y en el Golfo de Vizcaya (+40%), así como de chicharro en el Cantábrico (+18%) y frente a aguas portuguesas y en el Golfo de Cádiz (+69,2%). El acuerdo también mantiene las posibilidades de pesca para anchoa del Cantábrico (29.770 toneladas).

De la misma forma, se incrementará la cuota de capturas de rape en aguas ibéricas (un 5,3%), pero se recortarán las posibilidades de pesca de esta especie en el Gran Sol (-1,5%) y en el Golfo de Bizkaia (-6,8%).

Por otro lado, la pesquería de cigala en el Cantábrico permanecerá cerrada en 2019 por tercer año consecutivo, aunque se podrán capturar 2.000 kilogramos de este stock con fines científicos. Las capturas de cigala en el Golfo de Cádiz y en aguas portuguesas, en cambio, aumentarán un 5,2%.

Según las cifras aportadas por el Ministerio español de Agricultura, Pesca y Alimentación, el Estado ha obtenido cuotas de pesca por un valor de 503,8 millones de euros, una cifra que supone un incremento de 26 millones de euros o del 5% respecto a los cupos de este año.

«Mi conclusión global de este Consejo es que España ha obtenido un muy buen resultado de esta negociación para el año 2019», ha celebrado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en la rueda de prensa en la que ha detallado el acuerdo.

En su opinión, el Estado español «ha reafirmado su compromiso indiscutible» con la sostenibilidad de los recursos pesqueros, ya que «todas las poblaciones pesqueras de principal interés comercial para la flota española se van a explotar bajo el objetivo del Rendimiento Máximo Sostenible (RMS)» en 2019.

Obligación de desembarque

Una de las principales dificultades de los debates han sido las soluciones que los Veintiocho debían pactar para conseguir que la flota comunitaria pudiera desarrollar su actividad a pesar de la entrada en vigor el próximo 1 de enero de la obligación de desembarque, que prohíbe a los barcos devolver al mar las capturas no deseadas.

Con la aplicación de esta nueva norma, parte de la flota del Estado, en especial el centenar de buques que faena en aguas del Gran Sol, corría el riesgo de tener amarrar ante la posibilidad de pescar especies para las que no dispone de cuota (llamadas 'especies de estrangulamiento').

El ministro ha explicado que el objetivo en este ámbito era conseguir que la prohibición de los descartes «en ningún caso» supusiera una «disminución» del esfuerzo pesquero, una meta que, a su juicio, se ha conseguido a través de una ‘bolsa’ de capturas accesorias a la que podrá recurrir el Estado español y de intercambios de especies con otros países.

En el primer caso, que afecta a cinco poblaciones (de bacalao, merlán y solla o platija), los Veintiocho han acordado crear un mecanismo según el cual los países con posibilidades de pesca pondrán a disposición obligatoriamente un 6% de sus cuotas al Estado español y Países Bajos, que tendrán que ofrecer a cambio otra especie.

Además, con respecto a siete pesquerías para las que la flota estatal no tiene cuota y no están incluidas en las ‘bolsas’ de capturas accesorias (como lenguado o solla en determinados caladeros), se han acordado de manera bilateral con otras capitales intercambios de especies con el objetivo de garantizar la disponibilidad de cantidades que los barcos del Estado español necesitan para seguir con su actividad.