Iñigo Hernando ha dedicado sus primeras palabras como alcalde de Galdakao a agradecer el apoyo recibido, no sólo en la votación sino en las últimas semanas, y prometer que dará voz a la ciudadanía en una legislatura que ha comenzado de una forma emotiva y con gran expectación, con el salón de plenos lleno hasta los topes. De hecho, muchos vecinos y vecinas han tenido que aguardar en el exterior, desde donde han saludado con cohetes la designación del nuevo primer edil.

EH Bildu ha logrado aglutinar en torno a su candidato los votos de Auzoak, plataforma vecinal que dio la campanada el 26M al lograr cuatro ediles, Usansolo Herria (dos concejales) y Elkarrekin Podemos (uno), que junto a los seis representantes de la coalición independentista han sumado mayoría absoluta, superando los ocho del PNV y PSE. De Esta forma, el partido jelkide ha perdido el gobierno municipal de una localidad que han controlado desde 1979. 

EH Bildu, por su parte, se hace con alcaldía de un municipio importante del área metropolitana de Bilbo. De hecho, con 30.000 habitantes Galdakao será la localidad más poblada de Bizkaia que gobierne en los próximos cuatro años, la segunda en Euskal Herria después de Errenteria.

Las negociaciones han sido intensas en las últimas jornadas, hasta ayer mismo, y el pleno se ha desarrollado en un ambiente de tensión contenida, hasta que finalizado el recuento se ha confirmado que Hernando se hacía con la makila, que le ha sido entregada por el anterior alcalde, Ibon Uribe. Lo ha hecho en medio de una gran ovación, la tercera de la mañana, tras las que han acompañado al anuncio del resultado de la votación y a las primeras palabras del nuevo alcalde. En la sala, varios vecinos y vecinas mostraban el ya conocido pañuelo rojo de los pensionistas, y también ha habido algún cartel en favor de los presos y presas políticas vascas. También estaba presente Bea Ilardia, cabeza de lista de EH Bildu en Bizkaia, galdakoztarra que ha sido edil en el consistorio en los últimos años. Y muchos periodistas.

Una vez concluido el pleno, decenas de personas aguardaban a Hernando en la plaza consistorial, detrás de una gran pancarta en demanda de pensiones dignas. El ambiente ha sido eminentemente festivo, como corresponde a un hito como el que se estaba viviendo.

También ha sido histórico lo ocurrido en Arrigorriaga, donde EH Bildu logró vencer en los comicios de mayo y ha logrado igualmente hacerse con la alcaldía después de más de tres décadas de gobierno municipal del PNV. Maite Ibarra será alcaldesa gracias al acuerdo programático alcanzado hace unos días con Arrigorriaga Gara, que entrará en el equipo de gobierno como responsable de dos áreas municipales.

De esta forma, la comarca de Hego Uribe, que durante mucho tiempo ha sido coto exclusivo del PNV va cambiando el color, pues a las alcaldías de Galdakao y Arrigorriaga, dos municipios grandes, hay que sumar las victorias de EH Bildu en Arrankudiaga y Arakaldo, que se han repetido en las últimas legislaturas. Los jelkides mantienen sin embargo su primacía en Ugao y en Basauri, la localidad más poblada, con 40.000 habitantes.