El candidato opositor Ekrem Imamoglu ha vencido en las elecciones municipales de Estambul, cuya repetición había forzado el gobernante AKP por supuestas irregularidades en los comicios municipales del 31 de marzo.
En aquella ocasión Imamoglu también ganó con unos pocos miles de votos de ventaja pero las elecciones fueron anuladas por supuestas irregularidades denunciadas por el AKP.
La repetición electoral suponía un test decisivo para el presidente Recep Tayyip Erdogan, que no ha podido superar, y han convertido al futuro alcalde de Estambul en una estrella emergente opositora. La derrota abre una grieta en el poder de Erdogan, que se enfrenta además a una grave crisis económica.
Con unos 15 millones de habitantes, Estambul acoge casi la quinta parte de población de Turquía, pero además concentra el 30 % del Producto Interior Bruto (PIB) del país, por lo que su alcaldía es un puesto de enorme proyección tanto política como económica.
El AKP gobernaba la ciudad del Bósforo desde hacía 25 años y había sido el trampolín político del propio Erdogan hacia la presidencia. Por ello, el presidente turco se había volcado en la campaña conra Imamoglu, lanzando acusaciones contra él que solo han aumentado su popularidad.
«Un nuevo comienzo»
Por el contrario el próximo alcalde de Estambul apostó por una campaña de tono positivo con el lema «Todo va a a ir bien». Tras confirma su victoria este domingo, ha afirmado que supone «un nuevo comienzo para Turquía».
Binali Yildirim, candidato del partido islamista Justicia y Desarrollo (AKP), que gobierna Turquía desde 2002, ha admitido su derrota y ha felicitado públviamente a Imamoglu, del kemalista CHP.
El candidato conservador, mano derecha del presidente turco, ha obtenido el 45,2 % de los votos, en una jornada en la que la participación superaba el 84 %.
La diferencia entre ambos candidatos ha subido en los comicios de ayer hasta unos 750.000 votos y los primeros datos indican que Imamoglu se ha impuesto no solo en los feudos tradicionales de su partido, sino incluso en los barrios que hasta ahora votaban masivamente a favor del AKP..
El partido izquierdista prokurdo HDP respaldaba a Imamoglu. Sin embargo, una carta de Abdullah Öcalan, fundador del PKK y encarcelado y aislado, había vuelto a arrojar dudas sobre las predicciones, al pedir «neutralidad» a sus seguidores, ya que una abstención de los votantes kurdos habría favorecido al AKP
La carta llegó después de la primera visita de sus abogados que Öcalan pudo tener en los últimos ocho años.