Dos centenares de trabajadoras de las residencias de ancianos de Gipuzkoa, que secundan la huelga convocada por ELA, han iniciado este lunes en Donostia una serie de marchas por quince localidades del herrialde para denunciar «la situación insostenible» que atraviesa este conflicto laboral.

El responsable del sector de ELA Txomin Lasa ha explicado que es precisamente eso lo que quieren dar a conocer a la sociedad guipuzcoana con la nueva iniciativa, que se enmarca en la tanda de 30 días seguidos de huelga que llevan a cabo desde el pasado 19 de septiembre hasta el próximo 18 de octubre, y que se suman a las 88 jornadas de paro realizadas desde hace un año.

Las huelguistas han comenzado este lunes ante el edificio Txara, la sede foral de los servicios sociales ubicada en el barrio donostiarra de Intxaurrondo, una marcha reivindicativa que ha concluido ante la Diputación de Gipuzkoa, donde se han concentrado y hecho declaraciones a los medios informativos.

Han exigido a la Diputación que asuma el acuerdo que ELA –sindicato mayoritario– firmó con las dos patronales del sector –Adegi y Matia 2020–. Asimismo, han anunciado que van a «recrudecer» los paros y movilizaciones, y no descartan hacer la convocatoria indefinida si las instituciones no atienden a sus reclamaciones que son «justas y buenas» para los guipuzcoanos.

«Queremos denunciar que esta situación es ya insostenible, queremos trasladar un mensaje a los guipuzcoanos de que en esta Diputación la situación se está tornando muy grave y necesitamos el empuje y la ayuda de todos para ver si se dan cuenta de que la responsabilidad recae sobre ellos», han afirmado.

Sector «estratégico»

Además, han recordado que el de las residencias de mayores es un «sector estratégico en la provincia» y por ello las instituciones «deberían de apostar realmente por solucionar este conflicto». Sin embargo, han lamentado que «a día de hoy lamentablemente la situación es exactamente la opuesta».

«Tenemos una Diputación ausente que no se preocupa en absoluto de lo que está sucediendo y que perpetúa, en este caso en el sector de la tercera edad, una brecha salarial en un sector feminizado en contra de la igualdad, sin dar un sistema de calidad asistencial bueno», han subrayado.

En este contexto han reconocido que «probablemente toque dar un paso más y esto se empiece a recrudecer, con las consecuencias que ello conlleva». De este modo, han afirmado que seguramente las movilizaciones van a ir «subiendo exponencialmente» y no descartan ir a la «huelga indefinida»: «Cada vez estamos más cerca de un formato más agresivo».

Al respecto han indicado que ahora se están llevando a cabo «tandas de 30 días» de huelga y «probablemente tengamos que ir en aumento de manera que las tandas sean cada vez más continuas y con menos margen de espera entre una y otra».

Huelgas para avanzar

Han apuntado que las trabajadoras saben que «lamentablemente sin huelgas en este sector no hay manera de avanzar», ya que «aunque sea triste parece que las instituciones vascas están acostumbrándose a hacer un pulso muy largo con las trabajadoras y para ese pulso estamos preparados».

«Lamentablemente tenemos un chip en el cual las trabajadoras saben que por cada convenio va a tocar a hacer una huelga, porque sino no les hacen caso», han censurado, y han señalado que lo que piden «es justo y bueno para nuestros mayores», por lo que han insistido en que van a «pelear hasta el final».

Mañana, martes, protagonizarán otras dos marchas en Beasain y Ordizia, y continuarán los días siguientes en Zumaia, Zarautz, Irun, Eskoriatza, Arrasate, Tolosa, Villabona, Errenteria, Eibar, Elgoibar, Azkoitia y Azpeitia, hasta concluir con una manifestación el próximo día 18 en Donostia.