En un partido duro y muy competido, Super Amara Bera Bera al menos se ha llevado la victoria, pero no ha podido remontar las cinco dianas de diferencia que acarreaban del primer duelo en tierras rumanas.

El Brasov se ha mostrado como un rival que ahora mismo está un peldaño competitivo por encima de las guipuzcoanas, quienes no han cejado, pese a esa diferencia de nivel, a la búsqueda de un triunfo que brindar a sus aficionados.

No sin ciertos nervios y algo de precipitación, las locales han saltado a la pista muy motivadas ante una empresa que se antojaba complicada. Pese a llevar la iniciativa en el electrónico durante casi toda la primera mitad –eso sí, sin abrir una brecha importante–, en el último tramo de este periodo han sido conscientes del adversario que tenían enfrente.

El cuadro centroeuropeo se ha ido al descanso con un margen a su favor de cuatro dianas (14-18), lo que, sumado a las cinco que traía de su pista, situaban el reto en casi un milagro. Pese a ello, Bera Bera ha ido enjugando la diferencia hasta acabar por delante en el luminoso en el pitido final, algo que se ha agradecido desde la grada, aunque su aventura continental haya finalizado aquí.