El Gobierno griego ha anunciado que hasta comienzos del próximo año serán trasladados 20.000 migrantes de las islas del Egeo al continente y que paulatinamente irá sustituyendo los campamentos actuales por Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE).

Los CIE, en los que habrá también mujeres y niños, serán construidos en el transcurso de los próximos seis meses en las islas de Lesbos, Chios, Samos, Leros y Kos, que constituyen las principales vías de entrada desde Turquía hacia la Unión Europea.

Los centros de registro en las islas de Egeo, con una capacidad para 5.800 personas, acogen en la actualidad a más de 37.000. Los CIE tendrán una capacidad de alojamiento para alrededor de 25.000 personas.

Del total de 20.000 personas que serán trasladadas a la parte continental, 5.000 serán alojados en hoteles y los demás en instalaciones de acogida existentes, según el Gobierno.

El portavoz del Ejecutivo, Stelios Petsas, ha indicado que se crearán «centros cerrados previos a la partida», que facilitarán el control de los movimientos de los solicitantes de asilo e impedirán que pasen por la parte continental del país sin ser detectados.

«No pueden circular por el país sin restricciones y se debería enviar un claro mensaje a los que planean o piensan en venir al país ilegalmente cuando no tienen derecho al asilo», ha argumentado. «Deberían darse cuenta (...) de que si pagan dinero a un traficante para traerles a Grecia lo perderán», ha recalcado.

Las condiciones de vida de los miles de refugiados que residen en los centros que actualmente están operativos en las cinco islas del Egeo han sido denunciadas de forma reiterada por las ONG. Además, Grecia se enfrenta a un aumento en las llegadas este año.

El nuevo Gobierno conservador ha prometido endurecer sus fronteras y acabar con los cuellos de botella en los procedimientos para la concesión de asilo. El Parlamento heleno ha aprobado este mismo mes nuevas directrices más duras en lo relativo al asilo.

Entre los centros que cerrarán figuran el conocido campo de Moria, en la isla de Lesbos. Creado para acoger a 3.000 personas, en la actualidad residen en él más de 15.000. Será reemplazado por una instalación cerrada que procesará las nuevas llegadas y a las personas cuya solicitud de asilo sea rechazada.

El viceministro de Defensa, Alcibiades Stefanis, encargado de la coordinación de la gestión de la crisis migratoria, ha indicado que habrá un mando unificado de todas las fuerzas –Policía, Guardacostas, Fuerzas Armadas– implicados en la supervisión de las fronteras, y ha anunciado que próximamente serán contratados 1.200 guardias fronterizos mas, para reforzar el efecto disuasorio de las llegadas.

De ese total, 400 serán desplegados en la frontera terrestre greco-turca y los demás en las islas.

Según los datos del Gobierno griego, actualmente hay 67.000 demandas de asilo pendientes.