Arnaitz Gorriti

La montaña rusa de Kirolbet Baskonia ha terminado con victoria contra la Penya (87-86)

Interesante debut de Sergi García, muy buen director de un Baskonia que, pese a todo, ha desperdiciado un 66-43 a su favor. Los gasteiztarras se han visto 84-86 por detrás en el último minuto, pero un triple anotado por Shengelia y errado por Morgan los han rescatado.

El debutante Sergi García habla con Miguel González. (Jaizki FONTANEDA / FOKU)
El debutante Sergi García habla con Miguel González. (Jaizki FONTANEDA / FOKU)

Kirolbet Baskonia ha experimentado en un solo partido toda la montaña rusa que está siendo su temporada. Ha dejado pasar hasta 23 puntos de ventaja después de borrar del mapa durante muchos minutos a un Joventut que ha jugado mucho mejor cuando se ha olvidado de depender de Klemen Prepelic. Sin embargo, los verdinegros, que han visto truncada una racha de siete victorias seguidas, han remontado un 66-43 hasta ponerse por delante con 84-86. Pero un triple de Shengelia, y los posteriores errores de la Penya han regalado un agónico triunfo a los de Perasovic el día en el que ha debutado un más que interesante Sergi García. Los gasteiztarras, de paso, han aguantado el tirón para no desengancharse de la pelea por la Copa.

Mucha expectación en Zurbano después de la dolorosa derrota frente a Anadolu Efes, con el añadido de la baja de Vildoza por problemas en el hombro, justo el día en el que ha debutado Sergi García. Para empezar, nada mejor que la ovación que ha brindado la afición gasteiztarra en la presentación de su equipo. Y por una vez, después de tres partidos en los que Kirolbet Baskonia no ha ganado un solo cuarto, el equipo de Perasovic ha respondido.

Ante todo, gracias a la defensa sobre Klemen Prepelic, aunque el esloveno ha sabido cargar con dos faltas a Janning. En todo caso, el máximo anotador de la Liga ACB ha estado desasistido, mientras que en la otra canasta Stauskas se ha mostrado acertado y fluido. La entrada de Sergi García ha tenido lugar con un 13-6 en el luminoso, para terminar el cuarto con 25-9. El base balear no ha mirado el aro en esos primeros minutos, pero sí se ha mostrado activo en defensa e intenso, logrando ante todo no bajar la tensión. Quizá fuera puro acierto o haber agarrado una buena ola, pero los gasteiztarras se han despedido del primer asalto con un 4 de 7 en triples, y sobre todo sabiendo cómo parar a Prepelic.

La inercia triplista ha durado en el segundo cuarto, aunque el juego en sí ha perdido fluidez, sobre todo desde el momento en que ha regresado Pierria Henry a la cancha, aparte de la marcha de Ilimane Diop al banquillo. Por otro lado, Carles Durán ha encontrado un buen quinteto con Zisis, Prepelic, López-Arostegi, Morgan y Omic, y de pronto al cuadro gasteiztarra le han entrado las dudas. Prepelic ha hallado el camino del aro y sobre todo, la defensa verdinegra ha causado dudas y pérdidas a un Baskonia todavía demasiado endeble. Así las cosas, un parcial de 0-12 ha colocado a la Penya a solo seis puntos: 39-33, y menos mal porque Alen Omic ha seguido con su tradicional pelea con el aro desde la línea de tiros libres.

Casualidad o no, el regreso de Sergi García, que ha sabido buscar a Janning para los triples del nacionalizado georgiano, ha dado aire a los de Perasovic, llegándose al descanso con un 44-35 más que positivo, pero con cierto aire de incertidumbre al mismo tiempo.

Una incertidumbre que ha durado varios minutos más en el tercer cuarto. Una suerte de tanteo en el que nadie ha conseguido imponer su estilo de juego, hasta que Janning ha encadenado dos triples, con el añadido de un gran tapón de Micheal Eric a López-Arostegi. Una vez más, el Baskonia se ha disparado hasta el 56-41, obligando a Carles Durán a pedir tiempo muerto.

Alegría en el base

No vamos a decir ahora que Alfredo Salazar ha vuelto a sacar un conejo de la chistera, porque Sergi García no es ningún desconocido a estos niveles –de hecho, jugó contra Eslovenia en la primera de las Ventanas FIBA–, pero lo cierto es que el jugador balear, pese a su desacierto en el tiro, ha sido una alegría verlo porque ha demostrado, más o menos, cómo juega un base puro con criterios de base puro. El flamante fichaje del Baskonia ha sabido encontrar a Shengelia y al propio Micheal Eric, de forma que la renta gasteiztarra se ha disparado hasta el 66-43, dejando el partido prácticamente decidido.

Sin embargo, la cara B de esa alegría de ver a un base jugando de tal ha llegado con el regreso de Pierria Henry. El de Virginia ha jugado con un problema en los tobillos, por lo que alguna disculpa tiene, pero la Penya, sin un Prepelic desquiciado y que se ha ganado una técnica, ha respondido con un parcial de 0-10, alcanzando el último período aún con vida, aunque sea poca: 66-53.

Y en estas, la Penya ha entrado en el partido definitivamente; no se va a rendir así como así un equipo que suma siete victorias consecutivas. De la mano de Dimitrijevic y Morgan, los de Carles Durán han buscado las cosquillas a un Baskonia en el que el propio Sergi García se ha empezado a obcecar, por no hablar de los errores como faltas indebidas en ataque o en defensa, tiros que se salen, rebotes que se escapan... de Kirolbet Baskonia. Con 74-70, las alarmas han empezado a sonar y no han dejado de hacerlo casi hasta el final.

Y eso que Shavon Shields ha recuperado el acierto desde la larga distancia o que Shengelia se ha mostrado muy seguro desde la línea de tiros libres. Más aún, ya que Morgan, uno de los destacados verdinegros, se ha retirado con el tobillo lastimado. Los de Carles Durán han vuelto con todas las de la ley, logrando Harangody poner a dos puntos en partido después de dos triples.

Detalles positivos y negativos

Como suele suceder en un partido con final apretado, cada detalle ha contado sobremanera. La Penya se ha olvidado de tirar de Prepelic, pero ha sabido buscar a Morgan –de regreso– y Harangody. Durán ha confiado en Dimitrijevic y el macedonio el ha respondido, pero se ha comido un gran robo por detrás de Pierria Henry, mucho más entonado en esos instantes finales. Asimismo, dos tiros libres errados por Kanter con el marcador 83-78, ha parecido el canto del cisne de la escuadra catalana. ¡Pero qué va! Shengelia le ha devuelto el favor y el Joventut, de la mano de Harangody y un recuperado Prepelic, ha logrado un parcial de 1-8 para adelantarse 84-86, por primera y última vez en el partido, a poco más de un minuto.

Pero ahí ha asomado Shengelia para anotar el definitivo 87-86... Bueno, digamos «definitivo», porque Connor Morgan ha dispuesto un triple librado que bien hubiera podido cambiar el curso del partido. Pero no ha entrado, y a los postreros errores baskonistas, con Pierria Henry buscando una canasta ganadora y acabando la jugada con un triple errado por Shields, no le ha podido responder la Penya. Ojalá esto sea el verdadero punto de inflexión que Kirolbet Baskonia necesita.