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El recuento confirma la victoria de los principalistas en las elecciones legislativas iraníes

Los primeros datos del recuento de las elecciones legislativas del viernes en Irán confirmaban el triunfo del sector principalista, defensor de las esencias jomeinistas de la República Islámica, frente a las corrientes reformistas, personificadas en el presidente, Hassan Rohani. En espera de los datos de participación, la apatía electoral en Teherán apuntaba a una alta abstención.

Transeúntes en Teherán con mascarillas en pleno brote del coronavirus. (Atta KENARE - AFP)
Transeúntes en Teherán con mascarillas en pleno brote del coronavirus. (Atta KENARE - AFP)

Los resultados preliminares de las elecciones legislativas de ayer en Irán conceden ventaja a los partidos principalistas (conservadores en el argot occidental) frente a la corriente reformista que abandera el presidente del país, Hassan Rohani, a la espera de la publicación mañana del recuento oficial y definitivo.

Esta ventaja estaría siendo especialmente destacada en la capital, Teherán, donde están en juego 30 de los 290 escaños del Majlis, el Parlamento iraní.

En este sentido, el líder de la coalición principalista, exalcalde de Teherán y jefe de la Policía, Mohamad Bagher Ghalibaf, podría acabar este fin de semana como presidente electo de la cámara, de confirmarse estos resultados. El portavoz de la Comisión Electoral Nacional, Esmail Moussavi, ha avanzado que la lista de Bagher Ghalibaf, tres veces candidato derrotado a las presidenciales, miembro de los Guardianes de la Revolución y alcalde de Teherán entre 2015 y 2017; se habría llevado la mayor parte de los votos en la capital.

Las elecciones decantarían así la nueva estructura de una cámara en la que la coalición reformista Segundo Paso o Lista de la Esperanza ha ostentado durante los últimos cuatro años una cómoda mayoría (120 escaños) frente a la tradicional Coalición de Principalistas (86 escaños) y los independientes (66 escaños).

Los reformistas son conscientes de que las tensiones actuales con Estados Unidos han supuesto un revés a su política aperturista y solo esperan salvar la cara en estas elecciones. Cualquier resultado por encima de los 50 escaños sería considerado como un éxito, según los expertos y fuentes próximas a la corriente.

Otro de los datos que restaba por conocer era el de la participación, clave para medir la implicación ciudadana en unos comicios marcados por la exclusión de miles de candidatos reformistas. Las principales autoridades, de hecho, se habían esforzado en estos últimos días por subrayar la importancia de esta cita.

La agencia pública Fars ha informado de que 1,9 millón de personas habrían votado en Teherán sobre un censo de más de 9 millones de electores.