NAIZ

Intensifican la búsqueda de Beltrán y Sololuze en Zaldibar, aunque «la lluvia no ayuda»

Los integrantes de la mesa técnica han destacado este miércoles la intensificación de los trabajos de búsqueda de Joaquín Beltrán y Alberto Sololuze, los trabajadores desaparecidos en el derrumbe de Zaldibar, pero añadiendo que «la lluvia no ayuda».

Trabajos en la pista de acceso a la zona 2 de rescate de Zaldibar.
Trabajos en la pista de acceso a la zona 2 de rescate de Zaldibar.

Los trabajos para localizar a los dos trabajadores sepultados por el derrumbe del vertedero de la localidad vizcaína de Zaldibar se han intensificado, pese a que la lluvia de estos dos últimos días «no ayuda», según han reconocido los integrantes de la mesa técnica que realiza el seguimiento y la coordinación de las labores en la escombrera.

La reunión de la mesa técnica, integrada por representantes de los departamentos de Medio Ambiente, Salud, Seguridad, Trabajo y Justicia del Gobierno de Lakua y de la Diputación Foral de Bizkaia, se ha celebrado este miércoles en el centro de coordinación del barrio bilbaíno de Txurdinaga.

El viceconsejero de Seguridad, Josu Zubiaga, ha recordado que se delimitaron cuatro zonas, denominadas B/1, B/2, B/3 y B/4, para localizar a los desaparecidos, Alberto Sololuze y Joaquín Beltrán, y ahora se realiza «una búsqueda intensa» en esta última, en la que se ha determinado que podrían localizarse a los dos trabajadores tras el deslizamiento. En las otras zonas hay riesgo de deslizamiento de tierras, por lo que precisan de labores de estabilización y aseguramiento.

En la zona B/4, donde fue encontrado el coche de Beltrán, se trabaja con maquinaria de obra y verificación del material que se va moviendo por parte de personal de Emergencias, de la Ertzaintza y Bomberos de Bizkaia. También está presente la unidad canina ante «cualquier indicio».

«Movilización enorme de masa de residuo»

En cuanto a las lluvias de estos dos días, la mesa técnica ha señalado que «la movilización de masa de residuo en Zaldibar es enorme», hay zonas «con bastante riesgo e inestables, y el agua no ayuda».

Se estima que, hasta el momento, se han podido sacar de la zona 8.000 toneladas, todo ello para favorecer la búsqueda de las personas desaparecidas. Los residuos se están llevando a una cantera cercana, donde se realiza el cribado y donde personal de la Ertzaintza verifica la descarga del material. Pero hay que recordar que en cada uno de los dos últimos años el vertedero acogió más de 500.000 toneladas.

Por el momento, no hay personal forense en el lugar, que no se trasladará allí hasta que no aparezca «algún resto humano». También actuará en ese momento la Policía Científica.

¿Riesgo de nuevos incendios?

El secretario general de Lehendakaritza, Xabier Peña, ha recordado que en los primeros días existía «una situación de emergencia y urgencia», mientras que en estos momentos se sigue en «una fase grave», en la que los riesgos «siguen existiendo, pero están más controlados».

En esta línea, ha dicho que, en la actualidad, hay un equipo operativo específico que se dedica «a actuar con carácter preventivo antes de la existencia de cualquier nuevo fuego». «Identifica dónde están los nuevos focos de calor y tiene material e instrumentos para actuar sobre ellos antes de que sucedan», ha indicado.

También está preparado para apagar el fuego «en horas» si se produjera, según ha añadido. En todo caso, ha admitido que no hay «un riesgo cero», pero «está controlado».

El director general de URA, Ernesto Martínez de Cabrero, ha destacado que «el fuego está vencido, con todas las cautelas del mundo», y ha recordado el «episodio de susto» que se produjo con la reactivación de un foco y que «se solucionó con una buena reacción».

«Se está haciendo un depósito de unas 70.000 toneladas -pequeño para el gran desprendimiento que se produjo- que se va a habilitar para que estas zonas de búsqueda en las que trabajamos ahora y los escombros o residuos que allí se generen, puedan ser ubicados», ha añadido.