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Donostia

Iberpapel gana 21,7 millones en 2019, un 14% menos, por la presión en el mercado de la celulosa

El grupo papelero obtuvo un beneficio neto de 21,7 millones de euros en el ejercicio 2019, lo que implica un descenso del 14% respecto al año anterior. Para este ejercicio vislumbra un comienzo de recuperación de la demanda de papel, aunque queda por evaluar el impacto que tendrá el coronavirus.

La demanda de papel de impresión se ha visto afectada por la desaceleración económica.
La demanda de papel de impresión se ha visto afectada por la desaceleración económica.

Iberpapel ha visto cómo sus beneficios han caído desde los 25,2 millones de euros obtenidos en 2018 a los 21,7 millones del pasado año. Según ha informado la compañía, esta bajada se ha debido, fundamentalmente, a la presión en el mercado de la celulosa y por el parón de la empresa debido a la huelga de seis días registrada entre junio y julio.

La presión en el mercado ha supuesto una caída «significativa» de los precios de la celulosa, debido al elevado stock de pulpa a nivel mundial, y fundamentalmente en China, desde 2018 hasta los primeros meses de 2020. Esto ha influido en la demanda de papel de impresión y escritura en 2019, afectada también por la desaceleración de la economía mundial y el ajuste de inventarios.

A pesar de ello, Iberpapel ha conseguido mantener los precios de venta, si bien ha supuesto una ligera cesión en las unidades físicas vendidas.

En cuanto a las ventas de papel, energía eléctrica y madera, la compañía registró descensos en los tres sectores, con caídas del 2,8%, el 4,5% y el 25,3%, respectivamente.

Previsión para 2020

Iberpapel ha señalado que, aunque es pronto para hacer una previsión, para este año hay signos de un comienzo de recuperación de la demanda de papel, aunque todavía no se puede valorar la repercusión de la crisis del coronavirus en la economía global y en el mercado papelero en particular.

En 2020, el Grupo Iberpapel iniciará la puesta en marcha de las nuevas instalaciones, dentro del programa de reforma y modernización de su actual planta de celulosa de Hernani.

La empresa incrementará entre un 15% y un 20% la capacidad de producción de la planta, lo que conllevará una parada técnica por un periodo aproximado de entre 45 y 52 días.