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De Somalia a México, estrategias para minimizar el cierre de escuelas y la falta de internet

En 71 países de todo el mundo, menos de la mitad de la población tiene acceso a internet, recuerda Unicef. Subraya que «el acceso a la tecnología y a los materiales necesarios para seguir estudiando mientras las escuelas permanecen cerradas es notablemente desigual» y que estas desigualdades podrían agravar la crisis mundial del aprendizaje.

En Timor-Leste, el Gobierno ha puesto en marcha a través de internet, la televisión o la radio el programa de educación a distancia «Eskola ba Uma». (Bernardino SOARES/UNICEF)
En Timor-Leste, el Gobierno ha puesto en marcha a través de internet, la televisión o la radio el programa de educación a distancia «Eskola ba Uma». (Bernardino SOARES/UNICEF)

Cerca de 1.200 millones de niños y niñas en edad escolar siguen afectados por el cierre de las escuelas a nivel mundial. En un nuevo informe en el que estudia el impacto de la educación a distancia en 127 países, el jefe de Educación de Unicef, Robert Jenkins, recuerda que ya «antes del covid-19, la educación ya estaba en crisis», pero «ahora nos encontramos ante una crisis educativa cada vez más profunda y que puede crear aún más divisiones».

«El acceso a la tecnología y a los materiales necesarios para seguir estudiando mientras las escuelas permanecen cerradas es notablemente desigual. Del mismo modo, los niños y niñas que no disponen de ayuda suficiente para estudiar en casa apenas tienen medios que faciliten su educación. Es fundamental proporcionar una diversidad de herramientas educativas y ampliar el acceso a internet para cada escuela y para cada niño y niña», remarca.

Según este estudio, en 71 países de todo el mundo, menos de la mitad de la población tiene acceso a internet. El 73% de los gobiernos, están utilizando plataformas en línea para ofrecer servicios educativos mientras las escuelas siguen cerradas.

En la mayoría de los países de África, menos de una cuarta parte de la población cuenta con acceso a internet.

En cuanto la televisión, subraya que es el canal principal que utilizan los gobiernos para ofrecer educación a distancia: tres de cada cuatro gobiernos de los 127 países incluidos en el informe utilizan la televisión como herramienta de educación. Según los datos proporcionados por este organismo de la ONU, en más del 90% de los países de Europa y Asia Central la televisión se utiliza como medio para proporcionar educación a distancia, mientras que en Asia Meridional ese porcentaje asciende al 100%. En el 77% de los países de América Latina y el Caribe se están ofreciendo programas educativos a través de los canales nacionales de televisión.

La radio es la tercer plataforma más utilizada, aunque la proporción de hogares en los que se dispone de radio varía considerablemente entre las regiones. Solo en uno de cada cinco hogares de Asia Meridional hay una radio, frente a tres de cada cuatro hogares de América Latina y el Caribe.

Los mensajes de texto, móvil y redes sociales son también una herramienta de educación a distancia muy utilizada. Y aunque casi en la mitad de los 127 países participantes en el informe se están proporcionando recursos en papel para llevar a casa, solo en un 11% se ofrecen visitas a domicilio.

Avances en el acceso a la educación a distancia

Entre los avances, Unicef destaca el programa de educación a distancia «Eskola ba Uma», o «La escuela va a casa» de Timor-Leste, que permite a los niños y niñas seguir estudiando a través de plataformas de internet, la televisión o la radio.

Otro de los ejemplos que cita es el de Somalia, donde se ofrecen clases grabadas que pueden verse sin necesidad de conexión a internet a través de tabletas alimentadas por energía solar que se están poniendo a disposición de los niños y niñas. Los vídeos de las clases también se comparten por WhatsApp y Facebook, y se retransmiten por radio y televisión.

En Mongolia, la televisión ha sido el principal medio para la educación a distancia. Unicef ha trabajado con el gobierno para producir clases por televisión para los niveles de preescolar y primaria en los idiomas tuvano y kazako, con el fin de llegar a la infancia de las minorías étnicas.

En Kirguistán, los niños y niñas pueden acceder a la educación a distancia a través de plataformas en línea, tres canales nacionales de televisión y dos aplicaciones móviles gratuitas. Unicef ha fomentado la elaboración y distribución de contenidos para los niños con necesidades educativas especiales garantizando que todas las clases de educación a distancia están disponibles en lengua de señas, y que todas las clases contengan subtítulos en uzbeko y tayiko.

En Uruguay, la alianza entre Plan CEIBAL y la empresa de telecomunicaciones ANTEL ha facilitado el acceso a todos los contenidos educativos del gobierno sin consumo de datos.

En Jamaica, el Ministerio de Educación está ofreciendo clases de todos los niveles a través de la televisión pública nacional, la radio, las plataformas de internet y WhatsApp.

En México, el programa gubernamental «Aprende en casa» ofrece servicios educativos a larga distancia a través de la televisión nacional, la radio y los canales digitales.

En Vietnam, destaca, «se han eliminado algunos exámenes y módulos del plan de estudios y otros se han aplazado hasta el próximo año escolar para permitir que los estudiantes se pongan al día de los contenidos educativos durante todo el curso que viene, minimizando así la presión académica y el estrés psicosocial».