La razón de que el Ayuntamiento de Iruñea haya cesado el Servicio de Atención a la Diversidad Sexual y de Género es, según el Consistorio, una presunta duplicidad entre las asesorías jurídicas y sexológicas ofrecidas tanto en este mismo servicio para la población de Iruñea como en Kattalingune, servicio LGTBI+ del Gobierno de Nafarroa, en este caso para toda la población del herrialde.

Desde los colectivos LGBTIQ+ y Transbollomarikas se ha manifestado tanto al INAI como al Ayuntamiento de Iruñea la complementariedad de ambos servicios y la pérdida en el modelo integral que este cese supone.

Así, representantes de los colectivos Naizen, Transkolore, Dekumas LBT, Zikutak-Bullerak, Asamblea Transbollomarika, Lugatibe, EHGAM Nafarroa, Kattalingorri, Heldu, Antsoainen Harro, Kukuluak, Laiak, Hormak, Programa de promoción de la salud sexual en hombres gays, bisexuales y HSH de la Comisión Anti-Sida de Navarra, Hegoak, Gozamenez y Sare han considerado el cese «una gran pérdida» porque debilita considerablemente «el modelo integral que se ofrece desde Harrotu donde la participación y el acompañamiento confluyen».

«Una gran pérdida también porque infravalora el trabajo de las profesionales de este servicio al reducirlo simplemente a las asesorías sexológicas y jurídicas, entendidas estas como las citas que se tienen con las personas usuarias, cuando su labor incluye otras muchas funciones», han añadido.

Asimismo, los colectivos han remarcado que en pocos meses saldrá un nuevo pliego para la gestión de Harrotu que marcará el funcionamiento, los recursos y el enfoque de intervención del servicio y creen que el devenir del centro ha de pasar porque «las necesidades y valoraciones de los colectivos LGTBIQ+ marquen las directrices del mismo y no al revés».

Propuesta para mantener «el carácter integral» de Harrotu

«Y aunque nos hayamos podido sentir escuchades, no nos sentimos tenides en cuenta», han subrayado. Razón por la que expusieron a todos los grupos municipales la propuesta sobre «qué es para nosotres Harrotu y cómo ha de ser».

Una propuesta que, ante «todas estas idas y venidas, mareos y cambios de pelota en el tejado entre Gobierno de Navarra y el Área de Cultura e Igualdad del Ayuntamiento de Pamplona», marca la manera de poder «mantener mínimamente el carácter integral de Harrotu».

En este sentido, han incidido en que Harrotu debe incluir un servicio de información, un servicio de encuentro, un servicio de empoderamiento y un observatorio contra la LGTBIfobia propio.

Asimismo, han remarcado que tanto los Servicios que hay en Harrotu como el propio espacio han de estar atravesados por la idea de que, además de ser un Servicio, es un «espacio de intercambio, encuentro y empoderamiento individual y colectivo de las personas LGTBI+».

«Que sea también un espacio para los colectivos LGBTIQ+, teniendo libre y autónomo acceso para el uso del espacio y materiales», han exigido.

Entre las peticiones, han subrayado la importancia de articular además una estructura «lo suficientemente permeable y con personal suficiente para garantizar que se puede actuar de forma descentralizada en todos los barrios que conforman la ciudad», trabajando en red y creando programas con los diferentes agentes de los mismos.

Para ello han solicitado «contar con personal suficiente» y mantener mínimamente los cuatro puestos de trabajo, «que para nada son prescindibles».

Además, ven necesario que dichas personas tengan formación en el ámbito de la sexología, transfeminismo y conocimiento sobre la realidad LGTBI+ de Iruñea.

Los colectivos han dado por finalizada la concentración tras registrar frente al Área de Cultura e Igualdad en la Calle Descalzos la propuesta sobre la que han estado trabajando.