TERESA MOLERES
SORBURUA

Preparar el invierno

V a siendo tiempo de resguardar las plantas de interior que sacamos al balcón para pasar el verano, ya que hay que evitarles las primeras bajas temperaturas nocturnas. Pero antes vigilaremos su estado para que plantas y tiestos entren sanos en casa.

Debemos eliminar las flores secas y las ramas muertas. También cortar, si lo necesitan, las plantas arbustivas que hayan crecido desmesuradamente para el espacio que les reservamos en el interior. Y suprimir las espigas florales ya marchitas de los coleos y fertilizarlos una última vez.

Las hojas grandes hay que lavarlas con una esponja húmeda y el resto, vaporizarlas o ducharlas con agua tibia y con presión moderada, teniendo cuidado con las hojas de los helechos y de follaje delicado. También se debe quitar el polvo de las hojas espinosas o peludas con un pincel o con un secador de pelo a temperatura media. Arañar el sustrato de la superficie y añadir, si se considera necesario, un poco de tierra nueva o un acolchado decorativo.

Otras plantas, como las frioleras no rústicas, piden cuidados especiales. Fucsias, algunos pelargonios y verbenas necesitarán un tiesto nuevo para pasar el invierno. En primer lugar, dejaremos secar un poco el cepellón para extraerlo con facilidad. Luego, recortaremos todas las ramas justo por encima de los brotes más cercanos a la base. Con un tenedor, desprenderemos la tierra de las raíces con cuidado para no estropearlas y recortarlas un tercio de su longitud, mirando que no tengan gusanos u otros parásitos que hayan escogido el cepellón para pasar el invierno, ya que podrían molestar a la planta durante su reposo. A continuación, colocaremos la planta en un tiesto –nuevo o viejo, pero después de limpiarlo con cepillo y lejía– con una mezcla de tierra y arena gruesa, y regaremos un poco.

También hay que preparar el invierno de las adelfas. Dejaremos de abonarlas y reduciremos los riegos, para luego efectuar los cortes y el tratamiento de final de temporada. Cortaremos solo las ramas que sobresalgan, porque la poda se hace a finales de invierno, rebajando las ramas en su mitad y los brotes laterales a diez centímetros del pie. Ahora sería conveniente realizar un tratamiento contra las cochinillas, vaporizando las hojas con agua jabonosa o, mejor, con un insecticida a base de aceite blanco.

Colocaremos los tiestos en el exterior, en un lugar que esté resguardado de las heladas y con mucha luz.