gara, donostia
EDITORIALA

Un emocionante reto a desarrollar en común

Finalmente, tras intensas semanas de negociaciones y acuerdos, tras una jornada cargada de gestos, declaraciones y emociones, Uxue Barkos fue elegida presidenta de Nafarroa con los votos favorables de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra, con la abstención del PSN y el voto en contra de UPN y PP. La presidenta esbozó y defendió contundentemente en su discurso el acuerdo programático que su Gobierno deberá desarrollar, estableció las bases éticas y políticas del cambio, debatió en abierto con sus socios, tendió la mano a quienes quieran aportar en positivo y puso en su sitio a unos representantes del régimen pasado que en más de una ocasión traspasaron el ridículo. Mientras estos últimos se posicionaban en negativo, el ambiente que se respiraba en el Parlamento navarro era de ilusión. La solemnidad del acto, que sin embargo resultó mucho más cercano a la ciudadanía que lo que suelen ser este tipo de actos, reflejaba lo titánico del reto que tienen por delante las fuerzas del cambio. Las fuerzas gubernamentales, las parlamentarias, las institucionales en general. Pero también las sociales, las políticas, las culturales y las económicas.

Porque la dimensión del cambio que necesita esta pauperizada y reprimida Nafarroa es «profunda», como bien dijo ayer Barkos, y requerirá del impulso de todas las personas que, cada una desde su ámbito, creen en una sociedad decente, más libre, basada en los derechos, cohesionada, potente en todos los terrenos que habitan sus ciudadanos. Se trata de un reto inmenso, inabarcable para un solo sector, para una sola tradición ideológica, y debe tejerse en común, gestionando la discrepancia, con responsabilidad y coherencia.

Ayer fue un día histórico, sin duda. Tras diferentes intentos, fracasos y derrotas, quienes han luchado durante décadas en favor de la libertad, la justicia y la democracia, quienes creen en la igualdad, vieron lo que hace poco parecía imposible. Es mérito de todos y todas ellas, es un emocionante reto que tienen en común.