Joseba VIVANCO
Athletic

Reforzar para aspirar

El equipo necesitará apuntalar su fondo de armario si ambiciona competir año a año en tres torneos.

Con el culebrón de Iñigo Martínez –si es que alguna vez lo hubo– resuelto a favor de la Real, la dirección deportiva bilbaina tiene ya un debate mediático menos cara a conformar la plantilla para la próxima temporada. Ahora toca centrar en que Aymeric Laporte siga de rojiblanco y no escuche los cantos de sirena que puedan llegar si es que lo hacen con la cláusula de rescisión en la mano. Porque si Gurpegi cuelga las botas, visto que Elustondo no cuenta para el eje de la defensa y que San José debería ser un último recurso, lo mismo que Bóveda una alternativa puntual, el Athletic necesitará apuntalar con algún central más el centro de la zaga, más allá de Etxeita y de que Laporte continúe sí o sí.

Un central es uno de los puesto que los leones necesitan reponer este verano, y habrá que ver si es suficiente con la subida, al menos en pretemporada, del cachorro Yeray, que últimamente ha entrenado en algún momento con el primer equipo. En marzo ya trascendió la información desde Iruñea del supuesto interés en los canteranos osasunistas David y Unai García, tasados en 10 y 9 millones, respectivamente, y que se desenvuelven en esa posición, pero si la apuesta es cierta un posible ascenso de los rojillos difi- cultaría esas pretensiones.

Con la portería bien cubierta a falta de decidir entre Herrerín y Kepa, los laterales están igualmente asentados con dos jugadores por puesto. Otro cachorro, el mediocampista gasteiztarra Mikel Vesga, el décimo jugador de la categoría que más minutos ha jugado y el séptimo que más pases ha dado este curso, parece, según avanzaba ‘‘Deia’’ hace unas fechas, que hará la pretemporada con los mayores.

Un refuerzo de casa para una medular en la que, sin suda, el mayor punto débil del equipo de Ernesto Valverde es suplir a Beñat. El técnico ha amortiguado sus contadas ausencias con la inclusión de Mikel Rico por delante de San José y en las últimas fechas con Iturraspe en lugar del navarro. Pero es evidente que la falta de de Igorre se hace notar y mucho en el juego actual de los rojiblancos.

En cuanto a los hombres de ataque, la salida de Viguera ya este verano debería ser un hecho y aparecen ya informaciones que apuntan a que incluso Ibai Gómez sería candidato a acompañarle, aunque le resta un año de contrato. Debe ser la confirmación de Sabin Merino tras lo apuntado sobre todo en el segundo tramo de la temporada, veremos si Williams sigue su progresión ascendente o sufre los clásicos altibajos de quien acaba de empezar, de Muniain se esperará y demandará muchísimo más, y la incógnita será el nivel de respuesta que dé arriba Aduriz, que cumplirá 36 años. Parece evidente que Valverde necesitará de algo más de artillería en la delantera porque la ausencia del donostiarra difícilmente ha sido taponada.

Titulares y suplentes

Más allá de las habas contadas que pudieran llegar, más allá de los que asciendan del filial, lo que está claro es que este Athletic necesita reforzar su plantilla para competir con ambición en las tres competiciones en las que volverán a estar. Porque una cosa es participar y otra aspirar. Y este club, precipitadamente o no, ha pasado en un cortísimo lapsus de tiempo de querer participar a querer aspirar. El tan manido fondo de armario, que a veces funciona y desata elogios y otras no y provoca lo contrario –léase la visita al Espanyol y al Levante–, no deja de ser corto no de personal sino de potencial. Los titulares son los titulares, y los menos habituales lo son por razones obvias, y como sentenciaría Marcelo Bielsa, «una titularidad es una condición de difícil acceso: merece ser respetada cuando se obtiene». Y Ernesto Valverde la respeta. Con lo que hay se ha llegado lejos y dado la cara, pero el nivel de exigencia física y mental –sin obviar las lesiones– cada año es tan alto que puede empezar a pasar factura a los titulares y requerir de más rotaciones.

Si el Athletic quiere seguir siendo uno de los fijos en la parte noble de la Liga, si quiere ser un asiduo en las últimas fases de una competición tan apetecible como la Europa League, necesita que su entrenador mire al banquillo en esos momentos cruciales del curso y tenga esos revulsivos de los que Txingurri hizo gala en su primera temporada tras su regreso. Pero una cosa es la necesidad y otra la realidad. Y si el Athletic se topa con esa cruda realidad y es imposible fichar otro Raúl García que fortalezca el proyecto, deberá seguir exprimiendo al máximo sus posibilidades con lo que tiene, que no es poco, pero justito si se aspira a algo más.

Iraizoz supera a Unzue en partidos

Gorka Iraizoz es uno de los rojiblancos que más en forma está acabando la temporada. Sin duda, uno de los hombres del Athletic este curso, seguramente oscurecidas sus actuaciones por el deslumbrante papel de Aduriz, o hasta por las campañas firmadas por hombres como Beñat o San José. Pero el guardameta que tan buenos partidos está firmando las últimas fechas, en Vallecas, La Rosaleda, San Mamés ante el Atlético, alcanzó este domingo un hito. Ya es con 319 el portero navarro con más partidos disputados en Primera, adelantando a su paisano Juan Carlos Unzue. El arquero rojiblanco ha encajado 436 goles, por los 398 de quien hoy ejerce como segundo de Luis Enrique en el banquillo del Barcelona. Otra huella deportiva más que deja Iraizoz en su trayectoria bajo palos, ahora que está a tres partidos de igualar a Andoni Goikoetxea en partidos en el Athletic y meterse entre los veinte leones con más participaciones de la historia.J.V.