A. PRADILLA–B. ZALDUA
BILBO
MITIN CENTRAL DE EH BILDU EN BILBO

Otegi reclama pasión y alegría en el camino al «Estado decente que el país necesita»

«Este país necesita buenas noticias». Arnaldo Otegi, líder de EH Bildu, remarcó la necesidad de un «Estado decente» y reivindicó el rol de la izquierda soberanista en las transformaciones sociales. Para los rivales en las urnas pero socios en su propuesta de acuerdo amplio, mano tendida, pero también claridad ante un «no» de Madrid.

«No vamos a fallar a este país, vamos a liberarlo y a construir el Estado decente que necesita». Arnaldo Otegi, líder de EH Bildu y candidato inhabilitado por los jueces españoles, cerró el acto central de la coalición independentista en Miribilla apelando a la necesidad de la independencia. No se quedó en una proclama, sino que acompañó al proyecto soberanista de emplazamientos concretos para un marco democrático. Se dirigió a PNV y Elkarrekin Podemos, a quienes recientemente lanzó una propuesta para acordar de nuevo estatus basado en el derecho a decidir con el que acudir a Madrid «por última vez».

A los jelkides, concretamente al aspirante a lehendakari, Iñigo Urkullu, le instó a aclarar qué harán si, como está previsto, el Estado veta cualquier iniciativa basada en las urnas que llegue desde Euskal Herria. Y a Podemos le solicitó «honestidad». «Si existe la más mínima posibilidad de democratizar el Estado, contad con nosotros. Pero cuando comprobéis, y ya lo estáis haciendo, que es imposible, sumaos a los procesos vasco y catalán», reiteró.

La resolución del conflicto ha estado, hasta el momento, preocupantemente ausente del debate de campaña. De hecho, únicamente aflora cuando algún candidato, como Urkullu, pretende utilizar la violencia de ETA como arma arrojadiza contra la izquierda soberanista, a quien le exige «autocrítica». Otegi no eludió el debate. En primer lugar, recordó a los jelkides que ellos estuvieron en el diseño de la dispersión de los presos vascos, que ha costado la vida a 17 familiares de represaliados desde que se puso en marcha a finales de los años 80. «¿Algo que decir? ¿Alguna autocrítica? ¿Alguna palabra de alivio?», planteó al PNV.

Otegi quiso poner en valor el papel de la izquierda independentista en el ámbito de la pacificación. Reconoció que este proceso no se ha completado, pero reivindicó el trabajo desarrollado y que facilitó que ETA anunciase el cese de su actividad armada. «Si aquí existe un cachito de paz, es porque lo ha traído la izquierda independentista; algunos pagamos seis años y medio de cárcel por eso, pero estamos orgullosos», dijo.

Todavía hay cuestiones pendientes, como el desarme y la salida de los presos. Dos hitos que, según remarcó, «vendrán de la mano de la izquierda independentista» porque es este movimiento el que siempre ha traído «buenas noticias».

El PNV ha tratado de amodorrar la carrera hacia las urnas presentándose como la única alternativa de gestión posible para Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Otegi rebatió esa imagen idílica reivindicando el trabajo institucional de EH Bildu. No se quedó ahí. Apeló no solo al qué se hace sino al cómo. «Es muy importante hablar de la gestión, pero también de la pasión. Cabeza sí, pero corazón también. Tenemos que poner a las personas y la emoción en el centro», planteó.

La intervención de Otegi tuvo también un punto importante de reafirmación de la izquierda soberanista. «Hemos elevado el nivel del debate», reivindicó, citando para ello a Platón. Admitió el líder independentista que en el momento de salir de la cárcel, en el mes de marzo, había crecido una sensación de desánimo entre las bases abertzales. Pero sacó pecho y recordó que los avances desarrollados en las últimas décadas han sido gracias al compromiso de miles de personas. Una base social a la que instó a volver a salir a la calle, convencer a los votantes y llenar las urnas el 25 de setiembre con papeletas de EH Bildu. Como señaló en su cierre, «este país necesita buenas noticias».

 

Trantsizioko erregimenaren kontra, nazioen burujabetza

Atzoko hitzaldiaren lehenengo esaldian ekarri zuen gogora Arnaldo Otegik Katalunia, CUP eta ERCri babesa emateko (baita saharar herriari ere). Izan ere, Miribillan egon zen, besteak beste, lehenengo alderdiko diputatua den Anna Gabriel. Kataluniatik Estatu espainolera pasatu zen segituan buruzagi independentista, egungo krisi eta blokeoa azaltzeko prest. Aristoteles filosofo klasikoa gogora ekarri ostean («ezin da korapilo bat askatu, nola eginda dagoen jakin gabe»), «inpunitate frankistarekin, Espainiaren batasunarekin, kapitalismoarekin eta errepresioarekin» lotu zuen trantsizioan kokatu zuen egungo korapiloaren jatorria. Clintonek Bushi botatako «ekonomia da, ergela» esaldi ospetsua moldatu zuen horretarako: «Trantsizioa da, ergela».

«Krisi ekonomikoak, politikoak eta prozesu katalanak irekitako krisi globalak erregimen zahar horren oinarriak mugitu zituenean, Estatuan alarma guztiak piztu ziren», hasi zen Otegi, adibide bezala monarkiaren eta bipartidismoaren krisiekin gertatutakoa jarriz: «Monarkia arriskuan zegoenean erregea aldatu zuten eta hirugarren hauteskunde batzuekin espero dute konponduko dela bipartidismoaren krisia».

«Zer falta zaie orduan krisi globala ixteko?». Galdera bezain motza erantzuna: «Katalunia eta gu». «Estatu espainiarreko oligarkien dominazio-proiektua kolokan jartzen duen bakarra da estaturik gabeko nazioen subiranotasunaren defentsa», azaldu zuen, zabalago. Trantsizioko erregimenaren korapiloaren aurrean, «akordio zabaletan oinarritutako» proiektua defendatu zuen atzo Otegik, «behetik eta jendearekin eraikitako proiektua, denen oinarrizko beharrak bermatuko dituen errepublika duina, Estatu duina».A.P.-B.Z.