GARA
JERUSALÉN

La crisis energética agrava aún más la situación humanitaria en Gaza

La compañía de electricidad de Gaza informó de que el suministro de energía en el sitiado enclave ha mejorado ligeramente después de que la central eléctrica recuperara su plena capacidad el viernes. Las restricciones han hecho que el 73% de sus aguas costeras estén contaminadas, lo que obligó a Tel Aviv a cerrar sus playas más cercanas.

El director de relaciones públicas de la compañía de electricidad de Gaza, Muhammad Thabit, dijo ayer a la agencia palestina Ma'an que 140 megavatios ya están disponibles en la Franja: 70 megavatios estaban siendo suministrados por Israel y el resto era producido por la central eléctrica de Gaza.

Thabit confirmó que la central volvió a operar el viernes con las tres turbinas funcionando correctamente, aunque señaló que los gazatíes aún no pueden sentir la mejora: la mayoría sigue recibiendo sólo cuatro horas de electricidad, seguidas de doce horas de apagón.

El miércoles se informó de que Gaza estaba intentando funcionar con sólo los 70 megavatios de Israel, después de que Tel Aviv redujera el suministro de energía al territorio a petición de la Autoridad Palestina (ANP) hace tres semanas.

Tras el cierre de la planta de tratamiento de aguas residuales de Gaza por la crisis de energía, las pruebas realizadas en julio en las aguas de las playas han mostrado que un asombroso 73% por ciento de las mismas están contaminadas. Según las pruebas realizadas por el Ministerio de Salud de Gaza, sólo cuatro playas de la franja son seguras para nadar. Las de Rafah, al-Qarara, al-Zahraa, Ciudad de Gaza y Jabaliya están completamente contaminadas y no son seguras para nadar.

Tres bebés, muertos

Según el departamento de calidad del agua de Gaza, la crisis de energía es la principal causa de la contaminación: 110 metros cúbicos de agua de alcantarillado han sido bombeados al mar sin tratar debido a la falta de energía en las instalaciones de tratamiento de residuos. El departamento advirtió de los serios peligros de nadar en aguas contaminadas que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), pueden causar inflamación en el sistema respiratorio, ojos, oídos, cavidades nasales y piel. Si los nadadores tragan el agua contaminada, corren el riesgo de desarrollar infecciones en sus sistemas digestivos.

La semana pasada, Tel Aviv se vio obligada a cerrar playas en el sur de Israel después de que las aguas residuales no tratadas de Gaza contaminaran las aguas mediterráneas circundantes.

La ONU advirtió nuevamente el jueves de las potenciales «consecuencias catastróficas» de la crisis energética en Gaza. «Algunas zonas sólo disponen de electricidad dos horas al día. La crisis energética, resultado principalmente de una disputa palestina desde abril, se suma a la vulnerabilidad de los dos millones de personas que viven en la Franja», dijo el portavoz de la Secretaría General de la ONU, Stéphane Dujarric.

Durante las últimas semanas, según ha denunciado Amnistía Internacional, tres recién nacidos han muerto en la unidad de cuidados intensivos del hospital al Shifa de Gaza. Forman parte de los al menos nueve pacientes fallecidos este año mientras esperaban en vano que las autoridades de Ramala tramitaran las solicitudes de fondos para cubrir los gastos del tratamiento médico fuera de la Franja. La obtención de esta cobertura económica es fundamental para los habitantes de Gaza que tratan de solicitar un permiso para cruzar el paso de Erez hasta Israel, o llegar a Cisjordania, para recibir tratamiento médico.

Algunos informes indican que desde abril dichas solicitudes se han ignorado o retrasado deliberadamente, tal y como se ha hecho en el pasado, en un intento por parte de la ANP de perjudicar a las autoridades de Hamas, que controla Gaza.

Enfado árabe por el cierre de la Explanada

La Liga Arabe, Jordania y el Gobierno palestino han condenado el cierre en vigor de la Explanada de las Mezquitas –por vez primera desde 1969– tras el atentado del pasado viernes en el que dos policías israelíes murieron en el ataque de tres palestinos con pasaporte israelí y han exigido la reapertura inmediata de este lugar sagrado, que Tel Aviv solo reabrirá a partir de hoy y de manera gradual.

«Inmediatamente debe reabrirse el templo y hay que impedir cualquier intento de cambiar el estatus histórico y natural de la mezquita», ha hecho saber la Liga, que ha advertido a Israel de las «peligrosas consecuencias» que comporta su cierre. «Jordania recurrirá a cualquier instrumento legal o diplomático para impedir cualquier intento de cambiar el estatus histórico de Jerusalén», según un comunicado jordano repudiado por el Gobierno israelí. El asesor religioso del presidente Abbas dijo que el cierre es «un crimen contra la religión que arrastrará a la región entera a una guerra santa en la que todos saldrían perdiendo».GARA