Ane URKIRI ANSOLA
VII CONFERENCIA INTERNACIONAL DE LA VIA CAMPESINA

CAMPESINAS UNIDAS PARA REIVINDICAR RESPETO E IGUALDAD

DERIO TOMÓ AYER EL TESTIGO DE YAKARTA (INDONESIA) AL ACOGER LA SÉPTIMA EDICIÓN DE LA CONFERENCIA INTERNACIONAL DE LA VIA CAMPESINA. LAS MUJERES, QUE CELEBRARON SU QUINTA ASAMBLEA INTERNACIONAL CON PLENA CONFIANZA EN CERRAR ACUERDOS DE MEJORA, FUERON LAS PROTAGONISTAS.

La diversidad campa, desde el domingo, en el Antiguo Seminario de Derio. Durante nueve días, campesinos y campesinas de todo el mundo se reúnen en asambleas para proponer nuevos modelos de estrategia en la agricultura. Los jóvenes iniciaron la andadura de esta séptima edición y siguieron su camino las mujeres. Al son de «Zutik emakumeak, hautsi gure kateak (mujeres en pie, romped nuestras cadenas)» dieron inicio a la quinta Asamblea Internacional de las Mujeres Campesinas. Atendiendo al dicho de que la unión hace la fuerza, las agricultoras darán qué hablar.

Hicieron frente, ayer simbólicamente, al patriarcado, al capital, a la criminalización, a la violencia y a la desigualdad, cuestiones todas presentes en el día a día, para terminar todas alzando la mano en el centro del escenario; gesto compartido por todo el auditorio con un apretón de manos como símbolo de solidaridad entre mujeres de distintos países y de distintas culturas, pero todas unidas en un mismo objetivo: la igualdad y el respeto.

«Alerta, que camina la lucha feminista de la Via Campesina» y «sin feminismo, no hay socialismo», gritaron al unísono las mujeres de un colectivo conjurado para combatir al patriarcado y al capital. 

Las campesinas remarcaron que tienen que identificar las luchas en común para que las propuestas tengan más valor. Por ello algunas se animaron a coger el micrófono y compartir, en una frase, su experiencia del día a día: «He experimentado en mi vida situaciones de violencia», «lucho contra el sistema del machismo», «lucho por la protección del medio ambiente» o «quiero seguir plantando mi semilla» fueron algunos de los retazos de vida trasladados. Los aplausos revelaron la sintonía y la identificación con lo expuesto por las compañeras. 

Marcar el camino

«Tenemos una crisis humanitaria sin precedentes», señaló Elizabeth Mpofu, coordinadora general de la Via Campesina. Mencionó las batallas a las que se enfrentan cada día, como la desigualdad, la guerra, las sequias o la violencia: «Son problemas creados por los seres humanos». Concretó que las mujeres están en la vanguardia de la producción y que cada vez participan en más luchas.

Francisca Pancha Rodríguez hizo un resumen de las cuatro anteriores asambleas, enumerando algunas de las mejoras que se implementaron tras los encuentros: «Paridad, vocabulario incluyente, reconocernos como campesinas, la Agenda 21 de las mujeres campesinas, el manifiesto de las mujeres en el campo...». Expresó que cada conferencia sirve para marcar el camino y explicó que si antes renegaban del feminismo, «porque en Latinoamérica estaba mal visto», ahora lo proclaman orgullosas. «Fue un gran paso para nosotras», reconoció.