Albiztur-Iruntxurre-Albiztur, Haciendo hambre para un plato de alubias

Una ruta para tocar el árbol más alto de Gipuzkoa o disfrutar de unas vistas inmejorables de Aralar.

En la primera nos tomamos el hamaiketako en Pagoeta, con manzanas y nueces entre otras delicias. En la segunda saltamos a Gares, donde llegó el aperitivo, compuesto por un pimiento y un vinito. A la tercera no fue la vencida, ya que hicimos un lavado de boca, con agua de Betelu. Ahora sí, a la cuarta, y cuando está a punto de agotarse… es el turno de la alubia, de la alubia de Tolosa… o de Albiztur, para ser más precisos.

Decíamos en la anterior que son varios los modos en los que la naturaleza “geológica” muestra la presencia de fallas (ruptura de continuidades geológicas), sobre un territorio: terremotos, volcanes, aguas termales y minerales. Tirando de la falla norpirenaica de Leitza hacia el W, aparecen sus continuidades responsables de las aguas de Betelu y Lizartza y así, llegamos a las inmediaciones de Tolosa y a Albiztur, no sin antes recoger las piparras de Ibarra.

En general, desconocemos todo lo que acontece por debajo de nuestras casas, carreteras, prados, bosques o cultivos, y el hecho de que enormes masas de rocas duras “se froten”, es un fenómeno cuyas consecuencias se transmiten hacia arriba alcanzando los suelos sobre los que se desarrollan los productos que comemos, en nuestro caso, las alubias. Y qué mejor para hacer apetito que partir de la misma iglesia de Albiztur, que situada por debajo de la carretera supone un pequeño esfuerzo extra por aquello de hacer hueco también a los sacramentos.

Continuando por la carretera GI 3041, alcanzamos la GI 2634, y del cruce, parte una pista asfaltada que se dirige hacia dos construcciones llamativas. Tras la segunda (con ventilación azulada), la pista toma una curva muy cerrada y será justo antes de ella cuando nos saldremos por la tangente.

El firme se hace menos firme y más cómodo para el pisoteo y en ligero descenso con vistas forestales hacia la izquierda, nos adentramos en una gran vaguada que encierra dentro de ella a otras, que identificaremos por sus errekas debiendo seguir siempre la traza dominante.

La primera es la principal. La segunda es el límite municipal de Albiztur y Tolosa y la que nos introduce en una repoblación forestal con enormes ejemplares de Abeto de Douglas; y la tercera es, la que nos advierte que está muy cerca la desviación que mediante sendero nos permite acercarnos y tocar, en un ida y vuelta, al árbol más alto, al menos, de Gipuzkoa.

Este árbol pertenece a la especie denominada abeto de Douglas (especie americana que tras secuoyas y eucaliptos es de las más altas). La primera vez que visité este ejemplar, hace unos 20 años, decía el texto oficial que alcanzaba 55 metros. Esta última ocasión junto a él tiene un panel que reza que son 61 metros los que se elevan hacia el cielo. Independientemente de su verdadera altura, lo cierto es que el ejemplar impresiona.

De nuevo sobre el camino forestal, continuamos de frente para alcanzar así un cordal secundario donde, bajo el hayedo, nos espera un nuevo camino que asciende, y que al poco, presenta una difuminada bifurcación donde tomaremos el camino por la derecha. Veremos así la parte superior de la repoblación forestal de enormes ejemplares anteriormente visitada, alcanzando así la GR, la cual seguiremos por la derecha y en rápida bifurcación por la izquierda. Si bien la GR continúa al frente, nos saldremos por la izquierda y monte a través llegaremos al cordal divisorio principal que alberga una pista. Allí veremos un mugarri con la A de Albiztur.

Tornando a la derecha, la pista asciende y junto a marcas blanquiamarillas, avanza de manera rápida, para llegar así a otra pista de rango superior, la cual tomaremos por la izda y enseguida por la derecha, de tal modo que tras observar dos construcciones a la izquierda anexas a esa pista desembocan en la antena principal, antesala de la cima de Aldaba, que es a su vez es otra antesala de la principal de Iruntxurre. La cima de Aldaba posee un vértice geodésico y ofrece muy bellas instantáneas hacia el macizo de Aralar.

Hermosas imágenes también se obtienen entre el collado de la cima de Aldaba y la principal de Intxurre o Iruntxurre. Para acceder a esta segunda cima, nos saldremos por el sendero que por la izquierda se dirige hacia la cima principal y que por su vertiente norteña y muy discretamente alberga un buzón.

Retrocediendo a las marcas blanquiamarillas, iniciamos el descenso señalado que nos conducirá a Santutxo, nuevo hito sito en la misma carretera GI 2634. Diversos giros esperan al mendizale antes de llegar al citado hito. Una opción, más atrevida, junto a un refugio, supone avanzar pese a que las señales te dicen que por ahí, no, introduciéndonos en el bosque con doble opción. La opción de derechas es más aventurera que la de la izquierda. La opción más segura es seguir las marcas que nos conducen a la carretera que desde Santutxo se dirige hacia Santa Marina, y por la derecha llegar a Santutxo.

Si bien desde allí un sendero se dirige hacia Albiztur, la comida generosa que nos espera, es motivo suficiente para prolongar este Ibiliz por el sendero local, señales blanquiverdes, que indican Albiztur a 3,9km, algo menos.

Ligeros ascensos y descensos, giros a derecha y a izquierda, con ventanas hacia el valle de Albiztur, entre un amplio mosaico vegetal, son el entretenimiento que espera al mendizale, que deberá sortear los troncos que la última ciclogénesis ha depositado sobre este SL.

Un cruce peculiar, con señalítica situada varios metros por encima, nos indicará que Albiztur está cerca, por la derecha, y que alcanzada una pista asfaltada, sin titubeos se acerca a la iglesia de Albiztur. On egin. Amén.