GARA
BILBO

La Mesa de Diálogo Social de la CAV se desintegra con la salida de UGT

Ni ELA ni LAB –que se descolgaron desde el inicio– ni CCOO ni UGT –que la abandonan ahora– forman parte ya de la Mesa de Diálogo Social de la CAV, un organismo que ha naufragado en una travesía que no ha durado ni siquiera un año. Fue en junio de 2017 cuando la consejera María Jesús San José (PSE) anunció su primera convocatoria.

El secretario general de UGT-Euskadi, Raúl Arza, informó de que el sindicato abandona la Mesa de Diálogo Social a raíz de que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu haya firmado el “Acuerdo Marco de Colaboración por el empleo y la cualificación en Euskadi 2018-2020” con Confebask, mientras que sí permanecerá en la de la brecha salarial.

La rúbrica de ese acuerdo ya provocó que el pasado viernes CCOO anunciara su abandono de ambos organismos, de lo que responsabilizó al Ejecutivo PNV-PSE y a la confederación patronal por haber actuado con «deslealtad» y «a espaldas» de los otros agentes que integraban la Mesa de Diálogo Social.

En la rueda de prensa que tuvo lugar ayer en Bilbo, Arza también censuró «la deslealtad» del Gobierno autonómico y de Confebask por consensuar «de forma bilateral» el acuerdo, ya que «deja en el camino a tres agentes que estábamos participando en el diálogo social que se puso en marcha en julio de 2017: a la Consejería de Trabajo, a UGT y a CCOO», por lo que «dentro del Gobierno tendrán que hacer el debate oportuno».

Resulta reseñable que UGT intente colocar dialécticamente al departamento de María Jesús San José, dirigente del PSE, a un lado de la balanza y al Gabinete de Urkullu en pleno al otro.

«No hemos entendido para nada la firma de ese acuerdo entre una parte del Gobierno Vasco y solamente la patronal porque, principalmente, hay algunos de los asuntos que se plasman en ese acuerdo en los que veníamos trabajando de manera tripartita, como es la prospección y la detección de necesidades formativas», precisó.

Indicó también que, con esta decisión, el Gobierno de Lakua «ha apostado con claridad por una de las patas del diálogo social, por la parte empresarial», cuando «el empleo y la reactivación social también tienen una dimensión sindical». Y advirtió de que «la mayoría de los asuntos que se plasman en este acuerdo, para que tengan repercusión en las empresas, se tienen que trasladar a través de la negociación colectiva». «Lo que se persigue es situar el empleo y la reactivación al margen del diálogo social, por el que seguimos apostando –matizó–, pero entendemos que tiene que ser de carácter tripartito».

«Ha sido una decisión desleal tomada con nocturnidad y alevosía, porque los temas que estaban en la agenda del diálogo social han sido usurpados por una parte del Gobierno y la patrona», criticó. Por ello, el líder de UGT-Euskadi exigió al Gobierno de Urkullu que «cuanto antes ponga en marcha el órgano para institucionalizar el diálogo social», así como que busque la fórmula, junto a la patronal, para que seamos capaces entre todos de recuperar el diálogo social tripartito, porque los trabajadores también juegan un papel relevante en las condiciones del empleo, salariales y para poder conseguir más y mejor empleo».

Acuerdo Interprofesional

En la misma comparecencia, la secretaria de Política Sindical e Institucional de UGT-Euskadi, Maribel Ballesteros, hizo referencia a la decisión de la Federación Española de Asociaciones dedicadas a la Restauración Social (Feadrs) de retirar la impugnación del Acuerdo Interprofesional de la CAV.

Ballesteros resaltó que Feadrs «hace un desistimiento, pero con reserva de acciones, lo que significa que renueva un plazo de impugnación de un año por si no se cumplen sus expectativas». Tras asegurar que UGT «siempre va a seguir defendiendo» el Acuerdo Interprofesional, advirtió de «las consecuencias que trae el abandono de la negociación colectiva en el ámbito vasco», por lo que «la negociación de un convenio específico en el ámbito de Euskadi, en este caso del sector de colectividades de restauración social, sería la forma de evitar la estatalización de la negociación colectiva».