Pablo CABEZA
BILBO

La dinámica escena reggae, recreada en Txapel Reggae Armintza 2018

La historia de Armintza y su relación con el reggae es admirable tanto por su tenacidad como por haber elegido un estilo que si bien tuvo un cierto arraigo en Euskal Herria, también ha pasado por periodos de olvido. Posiblemente esté remontando desde hace unos años, pero en Armintza siempre ha dado igual su situación: reggae, fiesta, buen rollo y un pueblo pequeño volcado con su festival, uno de los veteranos de la escena. Cita, sábado 14, tarde y noche.

Armintza regresa un año más con su propuesta de sonidos jamaicanos. Puede que no haya canciones número uno, ni estribillos que corear, pero el reggae es todo ritmo, el cuerpo no lo puede obviar, así que el baile, la cadencia, es su mejor baza para un publico generalista. Quienes sigan habitualmente el estilo y sus derivadas contarán con una baza más. No obstante, Txapel Reggae es un conjunto que incluye música, “enterados”, paseantes, enamorados de la noche, del amanecer y de un rincón encantador con paladar a salitre y amable con los que llegan a la pequeña aldea.

«La gestión no ha cambiado en nada –señalan desde Armintzako Jai Bazordea (AJB)–, hemos sido una Jai Batzordea durante todo este camino y lo seguimos siendo y como tal, es necesario cambiar de personas continuamente, aunque el espíritu permanezca. Somos los que crecimos con el Txapel Reggae como parte de nuestra infancia (el más veterano de la actual comisión tenía 6 años en 1990), pero, fuera de ella está el trabajo y colaboración de todas las generaciones tanto creadores como futuros organizadores, pues en Armintza la implicación es intergeneracional. Es normal, pues, sacar adelante un festival en las fiestas del pueblo sería imposible con los componentes de la Jai Batzordea».

El primer año, 1990, fue más o menos sencillo: Potato, Kannabis, ambos de Gasteiz, y Yassa, de Iparralde. Noches de reggae por Euskal Herria, ritmos jamaicanos hasta la última nota. Con el paso del tiempo la programación de Txapel Reggae se ha ido complicando, hasta llegar al presente, con un esfuerzo titánico, pero que resplandece desde el alegre cartel que muestra a unos pulpos arropando al listado de nombres que participan en la gran fiesta de Armintza y que incluso se suman a ella.

«La organización del Txapel Reggae se ha tenido que ir adaptando a los tiempos y las necesidades debido a la aceptación que ha tenido. Los comienzos serían muy difíciles, pero las expectativas no serían las mismas que hoy en día, donde después de tantos años se intenta seguir mejorando año tras año. Lo más complicado quizá sea intentar mantener sostenible el festival económicamente, lo cual es inversamente directo a la profesionalización. En cierto modo, podemos decir que intentamos ser lo más profesionales posibles sin serlo».

Y con esa profesionalidad sin carné ni ánimo de lucro se ha llegado a un festival tan potente como el de este año. No son comparables las fechas ni hay por qué hacerlo, todos implican esfuerzo y búsqueda de lo mejor incluso con un presupuesto ajustado y un esfuerzo colectivo, siempre falto de brazos, así que todos los años son vitales.

«Si se sigue celebrando el Txapel Reggae después de 28 años es porque nos gusta la música y el ambiente que se genera. Durante todas las etapas que ha vivido el festival siempre ha habido integrantes de la comisión que escuchaban este tipo de música 24 horas al día, tenían amigos que lo hacían y, por lo tanto, estaban al tanto con los grupos emergentes, de moda. Por eso, las propuestas y organización ha sido posible gracias a personas del pueblo como Gorka, Gonzalo, Félix… con la colaboración de Armintza.

Financiación

Armintza es un pueblo pequeño, así que conseguir financiación es una de las tareas más agobiantes. Son fiestas, se generan ingresos, pero un día de lluvia (que no parece ser el caso de este sábado 14, según previsiones meteorológicas), puede ser un revés doloroso.

«La financiación quizá sea el punto más difícil para Txapel Reggae. Diez personas de AJB ingeniándonoslas para conseguir dinero de diversas formas y reinvertirlo en las fiestas de Armintza. Por supuesto, el Ayuntamiento pone un granito de arena con la aportación a los barrios de Lemoiz para que celebren sus fiestas y un extra que recibimos en forma de colaboración por el festival. Está también la txosna que hace posible pagar a los artistas, aunque hay algunos que vienen por actuar en el Txapel. Las camisetas que todos los años cambian y han contado con diseños característicos, de lo más profesional a lo más artesanal. Estos últimos años algún lanyard. Pero nunca ha dado para demasiado, años de perdidas y años más tranquilos», se apunta desde AJB.

El espíritu de Txapel Reggae ha calado, no se concibe un festival más ecléctico, más “comercial”. «Ni se nos ha pasado por la cabeza tal posibilidad, se nos hace raro hasta el simple hecho de pensarlo. ¿Un Txapel Reggae sin reggae? No buscamos gente, ni beneficios… Lo único que nos mueve es mantener un festival abierto a todo el público, con un ambiente diverso donde familias que vieron nacer el festival vienen con los descendientes o grupos jóvenes vienen a pasar la noche, ver una multitud sonriente bailando al son del ritmo, un amanecer con el puerto de fondo, un pueblo implicado y colaborando por una causa… Aunque, creemos que es un festival bastante mixto, intentamos mantener un equilibrio entre diferentes géneros del reggae y procedencias (de Euskal Herria, de España y de otros países).

Un año en el que la calidad y el peso deriva en una fuerte presencia femenina. «Surgió como una posibilidad, pasó a ser un reto y al final es una realidad. En los tiempos en los que estamos, creíamos que era necesario consagrar la escena femenina. Eso sí, ha sido mucho más complicado conseguirlo que lo previsto, pues el abanico de posibilidades se estrecha muchísimo, aunque creemos que ha merecido la pena. ¡Esperemos que el publico lo disfrute!

Y podrá hacerlo desde las 16:00 con Jah Youth, King Burning, Basshwerri Sound System y Thunder Clap Sound System. Y ya de noche (22:30), Queen Omega & The Next Generation Family Band, Awa Fall, Inés pardo & Lone Ark Riddin Force, Caya y Mad Muasel meets Chalwa Band. Un programa con músicos de Gran Bretaña, Alemania, Trinidad y Tobago, Senegal, Italia, Cantabria y EH. Y como cada año, entrada libre.