GARA
ROMA

Di Maio afirma que cuenta con mayoría parlamentaria para rechazar el CETA

El acuerdo de libre comercio entre la UE y Canadá, que está en vigor de forma provisional, necesita ser ratificado por todos los Estados miembros. El Parlamento italiano decidirá pronto si lo acepta o lo rechaza.

El líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y viceprimer ministro, Luigi Di Maio, insistió ayer en que Italia no ratificará el Acuerdo Económico y Comercial Global con Canadá (CETA, por su siglas en inglés).

«El CETA llegará pronto al Parlamento italiano y nuestra mayoría lo rechazará y se negará a ratificarlo», afirmó Di Maio en un encuentro con una asociación de granjeros en Roma, declaraciones que fueron recogidas por Reuters. Además, el líder del M5S, que gobierna en coalición con la Liga de Matteo Salvini, advirtió de que, si algún funcionario o algún miembro del Gobierno «sigue defendiendo» tratados de libre comercio como el CETA, «será despedido».

«Estar en este punto, para mí, significa reivindicar un poco de sano soberanismo (...) Si te ocupas de los productos italianos en el mercado, buscas cómo defenderlos (...) Nosotros tenemos que defender Italia y la economía italiana», subrayó Di Maio, que también es ministro de Desarrollo Económico y Trabajo.

Las objeciones italianas se centran en el nivel de protección a las denominaciones de origen, ya que considera que el acuerdo protege a «muy pocas» de las que están catalogadas en el país transalpino: solo 40 de un total de 292.

Por su parte, Vincenzo Boccia, presidente de Confindustria, la principal organización patronal, indicó que sería «un grave error» no ratificarlo, ya que considera el CETA «abre Canadá a Italia», según recogió RadioCor.

El CETA, firmado en octubre de 2016, tiene carácter de acuerdo comercial mixto, ya que abarca competencias tanto de la Unión como de los Estados miembros. Por lo tanto, además de necesitar la aprobación de los gobiernos de los Veintiocho y del Parlamento Europeo, también tiene que ser aprobado por todos los parlamentos estatales.

Desde setiembre del año pasado se encuentra en vigor de manera provisional, a la espera de que reciba la aprobación definitiva. Por el momento ha sido ratificado por once estados. Pero bastaría con que uno de ellos no lo haga para que el CETA no pueda entrar en vigor en toda su extensión.