Fueron vecinos del barrio de Legina, donde se encuentra el Golf Artxanda, quiEnes avisaron al Ayuntamiento de Larrabetzu de un gran corrimiento de tierras dentro del perímetro. Tiene un frente de entre 30 y 40 metros y una profundidad de más de 5 que, junto a rocas y árboles, se han deslizado 200 metros ladera abajo hasta llegar a tapar uno de los arroyos afluentes del Aretxabalgane. «Al parecer este invierno lluvioso y el enorme sistema de drenaje abandonado ha sido el coctel adecuado para producir el derrumbe», apunta el Ayuntamiento, que señala que «hay tuberías rotas, con el riesgo que supone ello».

Desde el Consistorio recuerdan que los terrenos del golf «están en una situación de abandono total y son propiedad de varios bancos».