La reconversión monetaria anunciada por el Gobierno de Caracas, como parte del denominado plan de recuperación económica, entró en vigor ayer en Venezuela cuando comenzó a circular el bolívar soberano y que, según el presidente, Nicolás Maduro, es el punto de partida de un «gran cambio».

«Vamos a desmontar la perversa guerra del capitalismo para instalar un sistema económico virtuoso, equilibrado», afirmó Maduro horas antes de la entrada en vigor de una reforma que implica la eliminación de cinco ceros al bolívar y el cambio del nombre de la divisa que ahora se llama bolívar soberano. La reforma arrancó en medio de las dudas de los venezolanos, que temen que pueda profundizar la crisis en el país.

Maduro anunció, además, que a partir del 1 de setiembre entrará en vigor el nuevo salario mínimo de 1.800 bolívares soberanos, que representa un aumen- to de 3.300% respecto al sueldo de 51,9 bolívares soberanos acordado en junio. Precisó que el nuevo salario equivaldrá a medio petro, la criptomoneda venezolana vinculada al precio del barril de crudo.

Al respecto, el presidente advirtió a los comercios para que eviten incrementar precios «a lo loco» tras ese aumento.

Maduro anunció también un ajuste al 16% del IVA y que llevará a precios internacionales la gasolina que se vende a menos de un centavo de dólar el litro y es la más barata de mundo. El subsidio solo se mantendrá para quienes cuenten con el «carnet de la patria», con el que se tiene acceso a beneficios sociales.

Al haber sido declarado ayer festivo, el impacto del nuevo sistema cambiario se conocerá hoy, aunque el proceso podría verse afectado por la convocatoria de la oposición de un paro de 24 horas en protesta por estas medidas económicas «desordenadas e irracionales que aumentarán el caos y la crisis económica que atraviesa Venezuela».

En las horas previas a la entrada en vigor de esta reforma monetaria, la segunda en una década, se veía a ansiosos comprado- res en los supermercados, largas filas de automóviles en las gasolineras y numerosos comercios cerrados esperando el cambio.

Algunos analistas prevén que estas medidas potenciarán la hiperinflación, la escasez de bienes y la recesión.

Tropas brasileñas a la frontera

Esta reforma coincide con serias tensiones migratorias en la región. La ONU estima que 2,3 millones de venezolanos han abandonado el país por la crisis. Brasil enviará tropas a su frontera con Venezuela tras los incidentes del sábado en Pacaraima, donde residentes quemaron los campamentos improvisados de venezolanos después del robo con agresión a un comerciante, que atribuyeron a los inmigrantes. Caracas instó a Brasil a «garantizar la seguridad de los nacionales y sus propiedades».

El Gobierno brasileño, que anunció nuevas medidas de asistencia social y de seguridad, afirmó que un cierre de la frontera con Venezuela tras esos incidentes es «impensable» y sería «ilegal», después de que las autoridades del estado fronterizo de Roraima volviera a pedir a la Corte Suprema el cierre temporal de la frontera, lo que denegó hace tres meses.

Unos 50.000 venezolanos han entrado por Pacaraima en el último año y medio, y muchos se han establecido en su capital, Boa Vista. Unos 800 ya han sido trasladados a otras ciudades como Sao Paulo, Brasilia o Río de Janeiro. Por su parte, Ecuador comenzó el sábado a bloquear el paso de venezolanos exigiéndoles pasaporte, que la mayoría no tiene, en lugar de la cédula de identidad, lo que les dejó varados en la frontera. Algunos llegaron ayer a Ecuador sin pasaporte, tras atravesar Colombia, mientras otros pedían la apertura de una «ruta humanitaria» que los conduzca a Perú. Este país adoptó una medida similar, por lo que Colombia teme que miles queden varados en su territorio.

Macri maniobra con sus vecinos para llevar al Gobierno de Caracas ante el TPI

El presidente argentino, Mauricio Macri, dice que, probablemente con otros países sudamericanos, pedirá al Tribunal Penal Internacional (TPI) que investigue presuntos delitos de lesa humanidad cometidos en Venezuela por el Gobierno de Nicolás Maduro.

Macri declaró a la CNN que «no me cabe duda de que en Venezuela se violan los derechos humanos sistemáticamente, atropellando a oposición y ciudadanos», y anunció que presentará la solicitud «en semanas», probablemente, junto a Colombia, Chile y Paraguay.

Sostuvo que en la región «cada vez hay más consensos de tomar medidas más contundentes en el intento, hasta ahora frustrante, de ayudar a los hermanos venezolanos», porque reconoció que las medidas adoptadas hasta ahora por diversos países de la región contra Venezuela han tenido pocos efectos.

El ministro de Exteriores de Perú, Néstor Popolizio, desveló el pasado mes de julio contactos entre varios gobiernos para presentar en el TPI «una propuesta conjunta» que impulse la investigación contra Maduro.GARA