El Ibex encajó ayer el primer recorte después de diez subidas consecutivas, su mejor racha desde 2009. Hoy comenzará con 9.521,80 puntos al ceder un 0,81%. En ningún momento estuvo en la tesitura de atacar los 9.600 puntos, nivel que había sobrepasado puntualmente en la sesión del viernes. Las bolsas europeas también se decantaron por las bajadas. París retrocedía un 0,33%, Fráncfort, un 0,64%, y Londres, un 0,42%. Wall Street, por su parte, se movía también con pérdidas a la hora del cierre a este lado del Atlántico.

El final de la racha del Ibex se produjo en un escenario diferente al de la semana pasada. La intervención de Draghi en el Parlamento Europeo, advirtiendo de una subida vigorosa de la inflación subyacente, empujó al euro por encima de los 1,18 dólares. Como se sabe, una apreciación fuerte de la moneda europea pone en dificultades a las empresas exportadoras, que siguen a la espera, además, de conocer la decisión de Trump sobre los aranceles al sector del automóvil. Por otra parte, la disputa comercial entre EEUU y China subía desde ayer otro peldaño al hacerse efectiva la aplicación mutua de más tasas.

En Europa, va creciendo la preocupación por el Brexit, dado que Theresa May no ha conseguido todavía el respaldo de los conservadores y sus opositores han elaborado un plan alternativo para una salida drástica.

Dentro del Ibex, se dejó notar la caída de Santander (-2,05%), perjudicado por una rebaja de recomendación. También cedieron bastante terreno Grifols (-2,09%), Inditex (-1,87%) e Iberdrola (-1,64%). De los pesos pesados, destacaba el avance de Repsol (+1,82%), el único en verde y subido a la ola del alza del precio del crudo, que ayer superaba los 80 dólares en el barril de Brent.