Si la pretemporada de Lointek Gernika Bizkaia, tal y como dijo su presidente Gerardo Candina, iba a estar enfilada para afrontar la eliminatoria de clasificación a la Eurocup, es hora de que el cuadro vizcaino pase examen y muestre el resultado de su trabajo de preparación. El Basket Namur Capitale belga espera, visitando Maloste esta misma tarde a las 20.00, para disputar el choque de vuelta el jueves en tierras walonas a partir de las 20.30.

«Ha sido una pretemporada dura. Tenemos un equipo nuevo, pero cada vez estamos más conjuntadas, preparando cosas de cara al partido de Maloste», se sinceraba la capitana de Gernika Bizkaia, Naiara Díez.

La escolta iruindarra confesaba que «se nos hace extraño que el primer partido sea tan importante, pero es lo que toca. Y como jugamos en Maloste, vamos tener que darlo todo», añadía.

Más allá de la entidad del rival, un habitual en la Eurocup, la novedad de esta eliminatoria es que Maloste pueda acoger partidos de competición europea, ya que el año pasado las gernikarras se vieron obligadas a jugar en La Casilla. Para tal efecto, el polideportivo ha vivido una pequeña transformación, añadiendo gradas supletorias a las ya existentes, lo que en principio debiera garantizar el buen ambiente.

Parte de la selección belga

Para acceder a la fase de grupos, donde esperan Girona, el Cargo Uni Györ magiar y Clube Uniao Sportiva luso en el grupo F, hay que superar a un Basket Namur Capitale entrenado por el seleccionador belga, Philip Mestdagh, recientemente cuarto clasificado en el Mundial femenino. Su hija Hanne Mestdagh, la base estadounidense Britney Jones y la pívot portuguesa Sofia Da Silva son varios de sus referentes en el parqué.

«Da igual lo buenas que sean ellas. Si nosotras hacemos nuestra mejor defensa, tendremos mucho ganado», explicaba, en cualquier caso, la capitana de Gernika Bizkaia.

«Si queremos ir a la liguilla posterior, toca pasar esta ronda y para ello, hay que ganar en Maloste. Hubiéramos preferido haber competido con anterioridad, pero jugamos en Maloste y la grada se tiene que convertir en el sexto jugador para que podamos sacar el mejor resultado posible», remachaba Díez.