GARA
BERLÍN

Kramp-Karrenbauer quiere «renovar» la CDU, pero resalta el legado de Merkel

La secretaria general de la CDU alemana defendió ayer una candidatura de corte continuista para suceder a la canciller Angela Merkel.

Annegret Kramp-Karrenbauer, considerada la heredera política de Angela Merkel, hizo oficial su candidatura para sucederle en la presidencia de la Unión Cristianodemócrata (CDU).

Kramp-Karrenbauer, apodada «AKK», «Merkel 2» o «Merkel bis», se convirtió en febrero en secretaria general del partido y es la favorita para suceder a Merkel, que el mes pasado anunció que no se presentaría a la reelección para dirigir la formación durante el congreso que se celebrará se celebrará el 7 y 8 de diciembre en Hamburgo.

La candidata de 56 años, nacida en el estado de Sarre, elogió el legado de Merkel. «Hoy está claro (…) que hay que darle las gracias a Angela Merkel por muchas cosas», aseguró en una rueda de prensa, reconociendo que seguirá los pasos de la canciller.

Su objetivo es abrir «un nuevo camino» en la continuidad frente a sus rivales que también aspiran a presidir el partido. Uno de ellos es el ministro de Sanidad, Friedrich Merz, y, otro, el ex jefe parlamentario Jens Spahn, que abogan por la «renovación» y por «un nuevo comienzo». Ambos pertenecen al ala más derechista de la CDU y han sido rivales internos de la canciller.

Kramp-Karrenbauer planteó el congreso de diciembre como una oportunidad para mostrar los distintos liderazgos sin abrir una pugna intestina que podría debilitar aún más a la formación política tras el varapalo electoral de su aliado bávaro, la Unión Social Cristiana (CSU).

«No voy a hacer campaña contra los otros aspirantes», subrayó. Aseguró que, de ser elegida, ofrecerá «puestos destacados» en el partido para sus dos contrincantes, Merz y Spahn.

En su comparecencia de ayer, la primera desde que Merkel anunció el 29 de octubre que no optará a su reelección como líder de la CDU ni aspirará a otro mandato como jefa del Gobierno, remarcó que sus prioridades serán la prosperidad económica, la reactivación del proyecto europeo y la integración, en un contexto de subida de la AfD.

Consideró necesario mejorar el equilibrio de poder entre el partido y el Gobierno. En su opinión, el Ejecutivo se ha impuesto con demasiada frecuencia a la CDU. Propuso tomar las decisiones en la formación para trasladarlas al gabinete. «Debemos revertir los procesos», dijo.

Kramp-Karrenbauer ha sido la última entre los tres aspirantes en presentar ante los medios su candidatura: Merz ofreció una conferencia de prensa la semana pasada y Spahn dio por abierta su campaña con una columna en el conservador diario “Frankfurter Allgemeine”.

Ayer, el líder de la CSU de Baviera, Horst Seehofer, desmintió que vaya a dimitir de su cargo al frente del partido. El diario “Die Zeit” aseguró que tenía intención de seguir los pasos de Merkel y dejar la dirección de su formación, aunque seguiría siendo ministro de Interior.