De momento, los 9.000 puntos deberán esperar. El Ibex echó ayer el freno en su ascenso hacia ese nivel sicológico y tuvo que conformarse con retener los 8.800 puntos. Durante toda la sesión caminó por detrás del resto de índices europeos, a diferencia de las jornadas anteriores cuando marcaba el paso alcista. Hoy comenzará con 8.823,60 puntos, tras retroceder un 0,27% en la última hora de negociaciones. En cambio, las bolsas europeas pudieron terminar en positivo. París se anotó un 0,84%, Fráncfort, un 0,83%, Londres, un 0,66%, y Milán, un 0,94%. Los índices de Wall Street también disfrutaban de avances moderados a la hora del cierre en Europa. El escenario no cambió sustancialmente respecto al martes. Se mantienen vivas las esperanzas de un acuerdo entre China y Estados Unidos para establecer un equilibrio en las relaciones comerciales. Desde ambos lados se han lanzado mensajes optimistas, aunque hasta ayer no se había emitido ningún comunicado conjunto constatando los avances.

Los inversores esperaban conocer el contenido de las actas de la última reunión de la Reserva Federal tras el cierre de las bolsas en Europa. Cualquier señal de relajación en la política monetaria movería las cotizaciones al alza. En Europa, el foco de preocupación apunta a Gran Bretaña, donde Theresa May afina su estrategia para salvar el Brexit blando, a pesar de las maniobras en el Parlamento para apartarla de las negociaciones con Bruselas. En el Ibex, los mayores lastres eran Telefónica (-2,04%) e Iberdrola (-1,04%), aunque el peor valor fue Bankinter (-2,13%). Todo el sector bancario cerró con caídas, a excepción de BBVA (+1,35%). Técnicas Reunidas (+5,21%), Indra (+4,83%) y Cie Automotive (+2,85%) registraron los mejores balances.