GARA
TEHERÁN

Irán hace piña en el 40 aniversario de la revolución por la presión de EEUU

Irán prometió el fracaso de los «planes demoníacos de sus enemigos», sobre todo Estados Unidos e Israel, con motivo del 40 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica, que en todo el país fue celebrada masivamente como acto de unidad ante la creciente presión de Washington y las dificultades económicas.

Bajo una incesante lluvia que en Irán se considera como una bendición, el presidente, Hasan Rohani, pronunció un discurso ante una enorme multitud en la plaza Azadi (Libertad) de Teherán para celebrar, como en otras ciudades del país, el 40 aniversario de la Revolución Islámica.

«La presencia del pueblo en las calles de toda la República Islámica de Irán (...) significa que el enemigo no alcanzará nunca sus objetivos diabólicos», afirmó Rohani tras denunciar un complot de EEUU, de los sionistas y de «Estados reaccionarios» de Medio Oriente contra Irán.

«No hemos pedido y no pediremos permiso para desarrollar diferentes tipos de misiles y continuaremos nuestro camino y con nuestras capacidades militares», añadió.

La asistencia fue creciendo durante toda la mañana y cientos de miles de personas de todas las edades se reunieron a pesar de la lluvia.

El 22 bahman del calendario iraní conmemora el derrocamiento del régimen del sha Mohamad Reza Pahlavi, diez días después del triunfal regreso del exilio del ayatolá Ruhola Jomeini, fundador de la República Islámica de Irán.

La multitud agitaba banderas con los colores nacionales y en medio de los paraguas se veían carteles o retratos del guía supremo, el ayatolá Alí Jamenei, o de Jomeini. «Muerte a Estados Unidos», «Abajo Inglaterra», «Muerte a Israel», «Pisoteamos a Estados Unidos», «40 años de desafíos, 40 años de derrotas para Estados Unidos», «Israel no vivirá más de 25 años», se podía leer en los carteles. En una calle se exponían dos réplicas de misiles balísticos, de fabricación local, y no muy lejos se veían réplicas de misiles crucero.

El umbral de los 40 años es simbólico en el mundo musulmán: es la edad en que, según la tradición, Mahoma recibió la revelación divina y comienza a transmitir el Corán. Para Irán este aniversario se celebra en un periodo de dificultades económicas y tensiones renovadas con EEUU. Los beneficios comerciales y financieros esperados con el acuerdo sobre el programa nuclear firmado en 2015 con las grandes potencias no se concretaron, y el país sufre por el restablecimiento de las sanciones estadounidenses tras su retirada del acuerdo en 2018. El aumento de los precios, la escasez de alimentos y la alta inflación provocaron el año pasado una inédita ola de manifestaciones contra el Gobierno. Ante esta situación y con el aumento de la presión estadounidense, las autoridades apelaron a la unidad. EEUU no ha ocultado que alienta las protestas y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, auguró el año pasado que Irán no llegaría a celebrar este 40 aniversario de la Revolución, un pronóstico que recordaron los asistentes a las celebraciones de ayer. «Este año nos han impuesto muchas presiones económicas e intentaron destruir la unidad interna, pero lograron el resultado opuesto. Cuanta más presión pone el enemigo sobre nuestro pueblo, la gente muestra más unidad, resiste y con todo corazón defiende su revolución», afirmó el agricultor Abnolfazl Hoseini, presente en la plaza Azadi.

«Han sido 40 años de fracaso. Ahora depende del régimen iraní cambiar su comportamiento y, en último término, depende del pueblo iraní la cuestión de determinar la dirección de su país», señaló ayer Bolton.