Después de dos días de descensos, el Ibex vivía ayer un rebote que le devolvió los 8.900 puntos perdidos el viernes. No obstante, no pudo en ningún momento asaltar los 9.000. Hoy comenzará con 8.936,40 puntos, tras anotarse un 0,90%. Las plazas europeas también registraron avances: París recuperó un 1,07%; Fráncfort, un 0,99%; Milán, un 1,21%, y Londres, un 0,82%.

La cuenta atrás para el fin de la tregua comercial entre EEUU y China se va consumiendo y, de momento, no hay nada oficial que haga pensar en el éxito de las negociaciones. Solamente mantienen el optimismo las buenas palabras de ambos lados y la esperanza de que ambos países comprendan el daño de una guerra comercial. Las revisiones a la baja de las previsiones de crecimiento económico podrían ser todavía más radicales si, finalmente, se imponen las prácticas proteccionistas.

Por otro lado, está en marcha otra cuenta atrás en el Brexit y a día de hoy nadie puede pronosticar un final feliz a la hora del divorcio, ni conocer en su justa dimensión las consecuencias económicas de una salida no pactada el 29 de marzo. Esta presión irá en aumento según se acerque esa fecha y el Parlamento británico mantenga su férrea oposición a admitir la salvaguarda irlandesa incluida en el acuerdo del Brexit.

En el Ibex, Meliá (-5,75%), ArcelorMittal (-1,19%) y Red Eléctrica (-0,95%) fueron los peores de la sesión. Entre los pesos pesados, los mejores fueron Inditex (+1,74%) y BBVA (+1,13). Al frente del índice terminaron Caixabank (+2,49%), Ence (+2,44%) y Mediaset (+2,41%), mientras Sabadell ganaba un 0,91% tras anunciar que cumplía los requerimientos de capital exigidos por el BCE para cubrir los riesgos derivados de la compra del banco TSB británico.